El IPC de Estados Unidos ha sido peor de lo que se esperaba. La tasa general ha bajado apenas dos décimas, hasta el 8,3 por ciento. Se esperaba un 8,1. Lo que más ha preocupado a los mercados ha sido que la inflación subyacente se ha disparado hasta el 6,3 por ciento. La Reserva Federal encontrará en estos datos motivos más que suficientes para seguir subiendo el precio del dinero. Y, además, para hacerlo de forma drástica. Ya nadie duda de que elevará otros tres cuartos de punto su tipo oficial en la próxima reunión del día 21. Y las que vendrán... Así que las Bolsas se han resentido, el euro se ha debilitado y han bajado los precios de los bonos, lo que ha hecho subir sus rentabilidades. Todo el pack completo de una tacada.

Tampoco han tranquilizado los IPC de España y Alemania, donde la tasa anual de inflación se ha situado en agosto en el 10,5 y en el 7,9 por ciento, respectivamente. Ambos datos se sitúan ligeramente por encima de los indicadores adelantados que se publicaron hace un par de semanas. Y muy lejos del objetivo del 2 por ciento que maneja el Banco Central Europeo. Ahora todos los mercados esperan el IPC de la zona euro, que se conocerá el viernes. Para colmo de males, el índice ZEW de confianza inversora de Alemania ha sido peor de lo que se esperaba, con una lectura de menos 60,7 puntos, frente a los menos 54,9 del mes anterior. Es un indicador muy seguido en los mercados.

El índice Ibex 35 ha cerrado en 8.064 puntos, con una pérdida del 1,59 por ciento. Se ha comido buena parte de las ganancias de ayer. Han aguantado mal que bien Telefónica y las eléctricas. La Unión Europea celebrará una “cumbre” el día 30 de este mes para aprobar los planes energéticos de emergencia. Es un paquete de medidas destinado a proteger a los ciudadanos y a las empresas del desbocado aumento de los costes de la energía. Además, las eléctricas, como los bancos, están muy pendientes del debate en el parlamento sobre los impuestos especiales y temporales que propone el gobierno para ambos sectores. Hoy han pintado bastos para las entidades financieras en Bolsa.

Ha flojeado Inditex, que mañana publicará resultados. La empresa gallega ofrece sus cuentas de su segundo trimestres fiscal, que va de mayo a julio. Los analistas esperan un beneficio neto próximo a los mil millones de euros, con un incremento superior al 15 por ciento respecto a las cifras de un año antes. La facturación, según lo expertos, puede haber aumentado un 13 por ciento en el trimestre, hasta 7.900 millones de euros.

En los demás mercados, el euro se cambia esta tarde por poco más de un dólar, cuanto esta mañana se acercaba incluso a 1,02. Y bajan los precios de los bonos en los mercados de deuda pública. La rentabilidad de las obligaciones españolas a diez años se mueve por encima del 2,8 por ciento. El "bund" alemán se va al 1,70 y el de EEUU supera el 3,4 por ciento. El Tesoro español ha colocado hoy letras a 3 y 9 meses. Ha captado 1.940 millones de euros. La demanda ha sido muy intensa, pero la tesorería pública ha tenido que asumir un mayor coste de financiación. La rentabilidad de los títulos a 9 meses se ha disparado desde el 0,597 por ciento hasta el 1,35.

Las letras a 9 meses han pasado del 0,138 hasta el 0,735 por ciento. Son sus niveles más altos desde el año 2013. Es una de las consecuencias de la reciente subida de tipos de 0,75 puntos que ha realizado el Banco Central Europeo la pasada semana. El Tesoro volverá el jueves al mercado con una subasta de bonos y obligaciones con la que quiere captar hasta 4.500 millones de euros.