El Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico ha publicado la orden para poder destinar "la cuantía necesaria" del superávit del sistema eléctrico para cubrir los desajustes temporales y las desviaciones transitorias entre ingresos y costes de los ejercicios 2019 y 2020.

Este escenario ya estaba contemplado en el Real Decreto-ley 23/2020 del pasado mes de junio lanzado por el Gobierno para hacer frente a cuestiones urgentes para el sector eléctrico y dentro de las políticas de recuperación necesarias ante la excepcional situación originada por el Covid-19.

Así, con el objetivo de asegurar el equilibrio y la liquidez del sistema eléctrico en el corto plazo, se habilita al departamento encabezado por Teresa Ribera al uso del superávit de ingresos del sistema eléctrico para cubrir los eventuales desajustes y desviaciones entre ingresos y costes del sistema de 2019 y 2020.

Según consta en la orden publicada este miércoles en el Boletín Oficial del Estado (BOE), la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia, como organismo encargado de las liquidaciones del sistema, transferirá desde la cuenta específica del superávit eléctrico a la cuenta de liquidaciones "la cuantía necesaria" para cubrir losdesajustes del sistema eléctrico del ejercicio 2019 que pudieran producirse, "de acuerdo con la mejor previsión disponible en el momento de elaborar la propuesta de liquidación de cierre y con el objetivo de que dicho ejercicio finalice en equilibrio".

LOS EMPLEARÁ SI ES NECESARIO HASTA SU AGOTAMIENTO.

Además, si una vez cerrada la liquidación de 2019, se dispusiera de fondos del superávit eléctrico, la CNMC los empleará en las sucesivas liquidaciones provisionales a cuenta de la liquidación de cierre de 2020 con el fin de cubrir las desviaciones transitorias entre ingresos y costes del sistema eléctrico "hasta el agotamiento de estos".

Este equilibrio del sistema eléctrico, amenazado en los últimos tiempos por factores coyunturales, como la caída brusca de la demanda y los precios como consecuencia de la crisis del Covid-19, será así cubierto con el uso del superávit registrado por el sistema eléctrico en los ejercicios pasados.

El sistema eléctrico acumuló durante los ejercicios 2014 a 2018 un superávit de 1.687,578 millones de euros, que custodia la CNMC. No obstante, una parte de ese superávit, unos 650 millones de euros, ya se utilizó en los últimos años a otras partidas, como devolver las cantidades financiadas por las sociedades o grupos de sociedades en concepto de bono social en ejecución de diversas sentencias anulatorias del Tribunal Supremo, o a ayudas a la inversión en instalaciones de renovables en territorios no peninsulares por unos 120 millones de euros.

De esta manera, actualmente, existe un saldo en la cuenta específica de depósito del superávit de algo más de 1.000 millones de euros más los intereses generados.

No obstante, a pesar de este superávit entre 2014 y 2018, la deuda acumulada del sistema eléctrico ascendía a cierre de 2019 a 16.602 millones de euros, tras haberse reducido en 2.249 millones de euros a lo largo del pasado año, lo que supone un descenso del 11,93% con respecto a los 18.851 millones de euros en que se situaba en 2018.