El consumo de combustibles de automoción se desplomó el pasado mes de abril un 59,1% frente al mismo mes del año pasado, cayendo hasta las 984.000 toneladas, su nivel mínimo desde que se dispone de datos (marzo 1996), lastrado por el impacto por el estado de alarma por la crisis sanitaria del coronavirus, según datos de la Corporación de Reservas Estratégicas de Productos Petrolíferos (Cores).

Esta cifra de mínimo histórico en el combustible de carburantes para la automoción supone un retroceso del 44,4% con respecto a marzo, en el que durante la segunda mitad del mes ya estuvo vigente el estado de alarma.

Las gasolinas cayeron un 77,8% frente a abril de 2019 y un 64,7% con respecto al pasado mes de marzo, mientras los gasóleos de automoción retrocedieron un 55,0% con respecto al mismo mes del año pasado y un 40,6% con las cifras de marzo.

En el acumulado del año, el consumo de los combustibles de automoción bajó un 21,0%, siendo mayor la caída en las gasolinas (-26,0%) que en los gasóleos de automoción (-19,9%).

En marzo descendieron el consumo de todos los grupos de productos, con los querosenos presentando la mayor bajada (-92,9%), seguidos de gasolinas (-77,8%), gasóleos (-36,2%), fuelóleos (-34,8%) y GLP (-26,0%).

En el acumulado del año, se registraron descensos interanuales en todos los grupos de productos: GLP (-6,2%), gasolinas (-26,0%), querosenos (-36,7%), gasóleos (-9,2%) y fuelóleos (-34,4%).

EL GAS NATURAL CAE UN 22,3%.

En lo que se refiere al gas natural, en abril se registró un descenso del 22,3% en el consumo frente al mismo mes del año pasado, situándose en 23.777 gigavatios hora (GWh).

Descendieron todos los tipos de consumo, el destinado a generación eléctrica (-32,6%) experimentando el mayor descenso, aunque es un 32,4% superior al de abril 2018, seguido del convencional (-20,0%), el menor para un mes de abril desde 2014, y el GNL de consumo directo (-12,7%).

En el acumulado anual, el consumo de gas natural cayó un 7,9%, con descensos del consumo convencional (-8,0%) y el destinado a generación eléctrica (-9,3%), mientras que aumentaron el GNL de consumo directo (+3,5%).