El Consejo Regulador de la Denominación de Origen (DO) Rioja asegura que la cosecha de este año podría ser "histórica", gracias al trabajo de control de maduración que están llevando a cabo los viticultores desde hace tres semanas.

Alejandra Rubio, técnica del Consejo Regulador, ha indicado, tras recoger las muestras, que los agricultores deben saber cómo está evolucionando la viña para decidir el momento óptimo y que la calidad de la uva sea la máxima posible.

De esta forma, el Consejo Regulador ha recogido uvas en 57 parcelas, teniendo cuidado de coger, en cada cepa, tres gramos por racimo de distintas orientaciones, con el objetivo de tener la máxima información posible. El miércoles, los agricultores recibirán el tercer control de maduración y se seguirán haciendo cada lunes mientras dure la vendimia.

El estudio de la maduración de la uva se realiza desde los años noventa en varias parcelas de las distintas zonas de la denominación, tanto de La Rioja, como Navarra y País Vasco.

Se estudian parámetros como el peso, el grado alcohólico, el PH de la uva y se ve la evolución de la semana. Una vez recogidos se llevan al laboratorio correspondiente según la zona: la Estación Enológica de Haro, en La Rioja, la Estación de Viticultura y Enología de Navarra (EVENA), en Olite, y La Casa del Vino en Laguardia.

Este año, se ha producido un adelanto general de vendimia de algo más de una semana, dado que las condiciones sanitarias, ha explicado Rubio, están siendo muy buenas y el peso de la baya se ve "significativamente más bajo que otros años".

"Parece que podríamos estar ante un cosecha muy buena; incluso se habla de histórica, esperemos que sí", ha afirmado la técnico del Consejo Regulador.