La vicepresidenta de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, ha apelado este jueves a cerrar "un gran acuerdo político y social para impulsar la reconstrucción del país", ahora que la pandemia del COVID-19 está en vías de control, un entendimiento que le ha instado a conseguir el Círculo de Economía.

Calviño ha participado esta tarde junto al vicepresidente ejecutivo de la Comisión Europea, Valdi Dombrovskis, en una sesión 'online' organizada por el Círculo de Economía el mismo día en que debían arrancar las tradicionales jornadas económicas de este influyente 'lobby' empresarial, aplazadas a septiembre por el coronavirus.

En su intervención inicial, el presidente del Círculo de Economía, Javier Faus, ha instado a "aparcar diferencias" y a sellar "grandes consensos" e incluso "un pacto de Estado" a largo plazo ante esta crisis provocada por la COVID-19.

La vicepresidenta económica ha recogido el guante y se ha mostrado abierta a alcanzar este "pacto de Estado" apoyándose en los activos con que cuenta el país y que no se han perdido con la crisis.

Calviño ha asegurado que "no tenemos que dudar de nuestra capacidad de recuperación" y ha apostado por aprovechar la actual situación para sentar las bases de un crecimiento "más sostenible e inclusivo".

El Gobierno, ha dicho, está aplicando las medidas económicas y sociales necesarias para salir de la crisis, pero sigue impulsando también las reformas de futuro que requiere el país, como el proyecto de ley del cambio climático, para reorientar nuestro modelo y aumentar la productividad de las empresas y el bienestar de la ciudadanía.

"Esto requiere el compromiso de todos, de los agentes sociales, los políticos, los ciudadanos y el tejido empresarial, que se ha comportado de manera tremendamente responsable durante la crisis", ha subrayado Calviño.

Faus ha mostrado su confianza con "las medidas fiscales, laborales y de incentivos que se están adoptando a fin de evitar cierres empresariales", pero ha pedido "un esfuerzo para que sean más ágiles, flexibles y mantenidas durante un tiempo prudencial hasta la total reapertura de la economía".

El 'lobby' económico ha reclamado también más inversión pública y la colaboración del sector público y el privado para avanzar en un entorno de "generosidad y solidaridad", con políticas expansivas a corto plazo pero con la necesidad, a su juicio, de volver a la "consolidación fiscal".

Calviño ha recalcado asimismo que el papel de Europa debe ser "clave" en esta recuperación y que su respuesta "ha de ser contundente". "Espero que pronto contemos con un plan de inversión y recuperación, financiado con deuda europea. Esperamos con gran interés la propuesta de la Comisión", ha incidido.

En este sentido, el vicepresidente ejecutivo de la Comisión Europea, Valdis Dombrovskis, ha destacado que la Unión Europea "está haciendo todo lo que puede para ayudar" a los países europeos más golpeados por la pandemia y se ha mostrado convencido de la elaboración de un "presupuesto de la recuperación".

Dombrovskis ha enumerado las medidas tomadas por la Comisión para paliar el impacto de la COVID-19 y ha recordado que España afronta un momento difícil debido, entre otros factores, al impacto sobre el turismo de la pandemia, teniendo en cuenta que es el segundo país del mundo en número de turistas.

Calviño ha recordado que la crisis derivada del coronavirus no tiene precedentes en tiempos de paz, ya que ha provocado la paralización de la economía mundial y una caída del PIB de España superior al 5 % en el primer trimestre.

"Este 'shock' ha desmontado de un plumazo todos los pronósticos que había", ha apuntado la vicepresidenta, que ha recordado que, según las nuevas previsiones que baraja el Gobierno, la economía española se contraerá este año por encima del 9 %, aunque en 2021 el país experimentará un crecimiento del 6,8 %.

En cualquier caso, el ajuste en el empleo "está siendo muy inferior al que tuvo lugar en 2008-2009, a pesar de que la contracción del PIB es mucho más acusada".

Por otra parte, Calviño se ha referido durante la jornada a la polémica sobre la reforma laboral y ha calificado de "absurdo y contraproducente" abrir ahora este debate, además de garantizar que cualquier cambio se hará de manera dialogada con los agentes sociales.

"Con la realidad que tenemos sería absurdo y contraproducente abrir un debate de esta naturaleza y generar la más mínima inseguridad jurídica", ha subrayado.

El presidente del Cercle d'Economía, Javier Faus, la ha trasladado a la vicepresidenta su preocupación por este asunto y se ha mostrado contrario a una reforma "integral".

Por su parte, el vicepresidente del Círculo de Economía y presidente de CaixaBank, Jordi Gual, ha llamado a "prepararse" para un "choque" económico provocado por esta pandemia que puede prolongarse "12 o 18 meses, o tal vez incluso 24 meses", ha dicho.

"A no ser que haya una novedad sanitaria muy importante -ha afirmado Gual-, lo más probable es que tengamos una caída (económica) que se prolongue en el tiempo, porque el producto potencial de la economía está cayendo, y que luego haya una recuperación que sea más débil (de lo esperado)" debido a factores como el temor al virus, a que las políticas económicas no hayan sido suficientemente contundentes en la primera fase de combate de la pandemia o bien a la situación financiera de partida de cada país. EFE

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