El índice Ibex 35 ha sumado hoy un 0,68 por ciento, hasta 8.388 puntos. En los mejores momentos del día ha llegado a superar los 8.400 puntos, un nivel que no se veía desde mediados de agosto. La de hoy es la quinta sesión consecutiva con ganancias. La Bolsa puede firmar, además, su sexta semana consecutiva con mejoras. Solo tres valores del Ibex han cerrado hoy en negativo. A saber, Banco Sabadell, Acerinox y Bankinter. Pero en ningún caso han sido pérdidas graves.

Hoy en Estados Unidos se celebra el Día de Acción de Gracias. La Bolsa de Nueva York y los demás mercados de aquél país están cerrados. Abrirán mañana, pero solo media sesión. Los inversores han aprovechado la ausencia de Wall Street para subir otro peldaño. Cuando no está el gato, los ratones hacen fiesta. Además, los inversores han saludado la inesperada mejora que ha experimentado el índice IFO de clima empresarial en Alemania. Este indicador, muy seguido por la Bolsa y los mercados de deuda pública, ha mejorado desde una lectura de 84,3 puntos en octubre a los 86,3 de este mes.

El mercado ha dado por buenas las actas del último consejo de gobierno del Banco Central Europeo. La mayor parte de los consejeros, ante las malas perspectivas de inflación, votó por la subida de tres cuartos de punto que se aprobó a finales de octubre. Y dejaron claro que el organismo seguirá endureciendo su política monetaria. Pero el peligro de una contracción económica puede suavizar sus próximos movimientos. Los mercados descuentan una subida de medio punto en el precio del dinero en la reunión del 15 de diciembre. Hoy ha hablado el vicepresidente del BCE, Luis de Guindos. Ha comparecido en Milán en un foro financiero. Ha remachado su impresión de que la inflación seguirá elevada en 2023, pese a que espera tasas negativas de crecimiento económico en la eurozona en el trimestre en curso.

En los demás mercados, el precio del petróleo se mantiene por debajo de los 85 dólares por barril. Ayer bajó con fuerza tras conocerse que la Unión Europea estudia poner un tope al crudo ruso de entre 65 y 70 dólares por barril. Es un precio superior a lo que se esperaba y, además, supera los costes de producción de las petroleras rusas. Moscú, por tanto y de confirmarse esa horquilla de precios, no sufriría un gran trastorno. Seguiría poniendo crudo en el mercado y continuaría obteniendo beneficios por sus exportaciones. Los analistas de Goldman Sachs esperan un precio medio de 115 dólares por barril en 2023.

En el mercado de divisas repunta el euro, lo que contribuye a aliviar la factura energética, que se paga en dólares en los mercados internacionales. Se cambia esta tarde por encima de 1,04 dólares, mientras la libra esterlina continúa con su recuperación. Supera ya el nivel de 1,20 dólares. Los expertos de JP Morgan esperan que el euro se debilite progresivamente, hasta alcanzar un cambio de 0,95 dólares antes de que acabe la primera mitad del próximo año. En el mercado secundario de deuda pública, bajan los rendimientos de los bonos. Las obligaciones españolas con vencimiento a diez años ofrecen una rentabilidad del 2,79 por ciento, frente al 1,84 de los bonos alemanes. La prima de riesgo, por tanto, se reduce a 95 puntos básicos.