En negativo han cerrado las Bolsas europeas. Los inversores han tenido que asumir numerosas referencias macro económicas. Ha habido de todo un poco, como en botica. La presidenta del Banco Central Europeo, Christine Lagarde, cree que la inflación puede haber tocado techo ya en noviembre, por lo que espera una progresiva reducción de los precios en los próximos meses. Por tanto, no cree que sea necesaria una subida de tipos de interés a lo largo del próximo año.

Al otro lado del charco, las cifras de paro en Estados Unidos han sido agridulces. La tasa se ha reducido más de lo que se esperaba, desde el 4,6 al 4,2 por ciento. Sin embargo, la economía estadounidense creó el mes pasado solo 210.000 puestos de trabajo, que son muchos menos de los que esperaba el mercado (550.000) y mucho menos de la cifra del mes anterior (531.000). El PMI del sector servicios de EEUU se ha reducido de 58,7 a 58 puntos, mientras los pedidos de bienes duraderos ha crecido un 0,8 por ciento. A este lado del Atlántico, las ventas por menor en la zona euro han superado las previsiones. Han crecido un 0,2 por ciento, frente a una contracción de tres décimas en el mes anterior.

Así las cosas la Bolsa ha cerrado con pérdidas una sesión que había comenzado con ganancias. El índice Ibex 35 queda hasta el lunes en 8.241 puntos, tras ceder un 0,71 por ciento en el día. En el conjunto de esta volátil e inestable semana la Bolsa ha perdido un 1,9 por ciento, lo que reduce la revalorización acumulada en el año hasta el 2,1 por ciento.

En los demás mercados, se deprecia el euro, se cambia por menos de 1,13 dólares. Y baja el Bitcoin, que últimamente está de capa caída. Esta criptodivisa se paga esta tarde 56.000 dólares. En pocas semanas se ha alejado rápidamente de sus máximos históricos de 68.000 que tocó a comienzos de noviembre. Tanto Estados Unidos como las autoridades de China han endurecido su regulación sobre las criptomonedas. El presidente Biden quiere aumentar el control fiscal sobre los tenedores de este tipo de activos. Hace poco Pequín declaró “ilegales y delictivas” todas las transacciones con activos criptográficos. Ahora estudia encarecer los costes de la energía a todas las empresas que realizan minería de criptomonedas.

El petróleo ha subido un 3 por ciento. Roza los 72 dólares por cada barril de crudo Brent del Mar del Norte. La OPEP ha decidido mantener su estrategia de aumentar su producción cada mes en 400.000 barriles diarios. Eso sí, ha dejado claro que puede modificar esta decisión si cambia la situación debido a la variante ómicron de la Covid-19. Así que en el mercado petrolero, como en la Bolsa, todas las espadas siguen en alto.

En el mercado de deuda, ha bajado la rentabilidad de las obligaciones españolas a diez años hasta el 0,38 por ciento. Los bonos de Estados Unidos al mismo plazo rinden un 1,44 por ciento. Hace una semana ofrecían un 1,67 por ciento. El dinero que sale de la Bolsa busca refugio en el mercado de deuda, lo que hace subir los precios y bajar su rentabilidad.