El Ayuntamiento de Barcelona destinará dos millones de euros a financiar reformas e intervenciones en establecimientos comerciales en planta baja, especialmente la instalación de puertas automatizadas, para cumplir con el decreto del Gobierno sobre ahorro energético.

Con esta medida, que tiene un presupuesto inicial de dos millones de euros y se espera que beneficie a un millar de establecimientos, Barcelona será la primera gran ciudad española en acompañar y apoyar económicamente los cambios que tendrán que hacer los locales en planta baja que se ven afectados por el plan.

La subvención se pondrá en marcha a finales de septiembre y supondrá una ayuda del 50 % del coste de las intervenciones, hasta un máximo de 2.000 euros por local solicitante.

En concreto, va destinada a la ejecución de actuaciones vinculadas a la mejora de la eficiencia energética y, especialmente, para la adecuación y automatización de las puertas de entrada a los establecimientos para mantener la temperatura en el interior y evitar el derroche de energía.

El nuevo decreto incluye esta obligación para todos los edificios y locales con acceso desde la calle, y los comercios tienen que adaptarse antes del 30 de septiembre de 2022.

En la rueda de prensa de presentación de la nueva línea de ayudas, el primer teniente de alcalde del Ayuntamiento de Barcelona, Jaume Collboni, acompañado de representantes del sector comercial, hotelero, de la restauración y del ocio nocturno, ha defendido este miércoles la necesidad de las medidas de ahorro energético, tanto para combatir la emergencia climática como para disminuir la dependencia energética de Rusia.

"Desde Barcelona nos planteamos estas políticas de ahorro energético de una forma radicalmente distinta de como lo ha hecho la Comunidad de Madrid y su presidenta, que lo han planteado una vez más como un punto de confrontación, practicando este tipo de negacionismo al cambio climático. Nosotros hacemos lo contrario y nos ponemos al lado del sector comercial", ha señalado Collboni.

"Todo el mundo con sentido común sabe que hay que ahorrar energía en estos momentos tan complicados de sequía, crisis climática y guerra en Ucrania", ha enfatizado.