La SGAE tiene "plena disposición para cumplir con los requisitos exigidos" por la Confederación Internacional de Sociedades de Autores y Compositores (CISAC), que hoy decidió iniciar un "proceso sancionador" en contra de la entidad española que podría desembocar en su expulsión.

Fuentes de la SGAE han señalado que así se lo han hecho saber al ente internacional desde la nueva Junta Directiva de la entidad de gestión española, presidida por José Angel Hevia.

"De hecho, muchos de estos requisitos" son medidas "que se han adoptado ya en estos primeros días del nuevo órgano de gobierno de la SGAE o se van a implementar en los nuevos Estatutos a partir de la Asamblea General Extraordinaria del 27 de diciembre", han añadido.

Entre esos requisitos citan "los que afectan a las normas de reparto, el nombramiento de un Director General, la creación de un órgano de supervisión externo, el control de los conflictos de intereses entre los miembros de la Junta Directiva o la petición de un mayor grado de transparencia".

El consejo directivo de la CISAC, formado por cerca de una veintena de socios internacionales, decidió hoy en París abrir este proceso contra la entidad española tras considerar que las medidas iniciadas por la SGAE para adecuarse a la normativa del organismo no habían sido suficientemente rápidas o serias.

Las quejas contra la SGAE se refieren al supuesto favoritismo hacia algunos de sus miembros y el fraude en el cobro de derechos de autor de piezas musicales emitidas en televisión, una práctica conocida como "la rueda", que está siendo investigada por la Audiencia Nacional.

Según han agregado las fuentes de SGAE, "confían" en que la CISAC "valore el trabajo que ya se ha empezado a hacer" y que el próximo 30 de mayo, fecha en la que se ha convocado la Asamblea de este organismo internacional, les "mantenga como miembros del Consejo de CISAC".