J.J. Porras

Víctor Cabezuelo, que junto a Julia Martín-Maestro dan vida a la banda Rufus T. Firefly, afirma que el grupo quiere dar un giro a su música tras varios años transitando por la psicodelia de los años 60 y 70 porque enseguida se aburren de ellos mismos.

La banda madrileña regresa mañana al Gran Café de León dentro de la gira de despedida de "MagnoliaLoto", que engloba sus dos últimos trabajos con los que se han afianzado como una de los grupos más destacados del panorama indie nacional.

Debutaron en 2011 con un larga duración titulado 'La historia secreta de nuestra obsolescencia programada', y luego vendrían 'Ø', 'Nueve' y 'Magnolia', trabajos arriesgados y ambiciosos, marcados por la obsesión de la banda de perfeccionar su sonido y la profundidad de sus texturas.

A principios de 2018 publicaron 'Loto', inequívoca continuación de su anterior trabajo con el que compone un cuerpo conceptual separado por un año y en el que se encuentran actualmente con la gira 'MagnoliaLoto'.

"Una gira increíble que nos ha cambiado la vida ya que antes de Magnolia sacábamos discos y aunque intentábamos hacer el máximo de conciertos posibles hacíamos entre 10 y 15 citas como máximo al año, y desde que salió al mercado Magnolia en enero de 2017 llevamos 130 conciertos", ha explicado en una entrevista con Efe Cabezuelo.

El cantante ha apuntado que la marcha de dos miembros y amigos del grupo en 2016 supuso un punto y aparte en su historia ya que a pesar de la "tristeza "que ocasionó también supuso la entrada de nuevo músicos y "el inicio de una etapa muy exitosa" de la banda con los dos últimos discos.

"'Magnolia' y 'Loto' son un viaje interior y una defensa de valores artísticos y basado en el respeto y el amor a la naturaleza, pero mientras 'Magnolia' está hecho de una manera muy cerebral y es un disco muy redondo, 'Loto' es mucho más espontáneo como sucede en los conciertos", ha explicado Víctor.

Calificados por los críticos como indie, a los Rufus no les gustan las etiquetas: "Me da mucha pereza y a nadie le gusta que le cataloguen ya que sólo queremos hacer canciones y cada una es una historia distinta", ha afirmado el cantante.

En este sentido, Cabezuelo tiene claro que en el actual concepto de psicodelia que ha presidido la grabación de estos dos discos ya han dicho "todo" lo que tenían "que decir".

"Ahora lo que queremos es encerrarnos y volver a pensar en una manera diferente de decir las cosas y sorprender a la gente ya que somos muy inconformistas con la música que hacemos y enseguida nos aburrimos de nosotros mismos", ha explicado.

Rufus T. Firefly llega a León para volver a demostrar a sus fieles seguidores lo mejor de una gira que acabará en la Sala La (2) de Apolo de Barcelona y en La Riviera de Madrid el próximo mes de abril.