Los artistas iraníes Nasrin Tabatabai y Babak Afrassiabi regresan a Barcelona, donde ya estuvieron en 2012, para ofrecer una instalación en la Fundació Tàpies, entre este sábado y el 14 de noviembre, con la que reflexionan sobre el impacto del opio en el mundo desde el siglo XIX y hasta la actualidad.

En una entrevista con Efe, Afrassiabi, acompañado por Tabatabai, con quien colabora desde 2004, y por la comisaria Azar Mahmoudian, rememora que el proyecto expositivo, "Motivos sensibles: Inhalar", empezó a tomar forma tras decidir mostrar una serie de 24 textos de autores de su país, como Sadegh Hedayat, en los que "había una continua presencia de gente que fumaba opio".

Tabatabai apunta que con estos fragmentos literarios se intuye el peso que tuvo esta sustancia en su país "como práctica social", agregando Afrassiabi que les interesa "todo lo que hay a su alrededor, porque se convierte en parte de la práctica de fumar opio, desde los cuerpos humanos, a las conversaciones, la arquitectura, los colores, los olores".

Decidieron traducir los textos al inglés y "apropiarse" de ellos, eliminando algunos nombres y sólo plasmando lo relacionado con la droga, de manera que el público "es como si viera el humo corriendo por estas narrativas".

A la vez, han creado tres objetos escultóricos, que se estrenan en esta exposición, que a través de unos cascos permiten "escuchar unos ruidos producidos algorítmicamente que simulan el sonido de una respiración afectada por la inhalación continua del humo del opio".

Para ello, se desarrolló un programa informático, con la colaboración de entidades holandesas y británicas, "a partir de algoritmos", calculando "la cantidad de opio que entra en el cuerpo y la probabilidad de que se deposite polvo de carbono en los pulmones y el impacto que eso tiene en las respiraciones".

Con un pie en Europa, donde residen parte del año, y otro en Irán, los dos artistas reflexionan, asimismo, sobre colonialismo, comercio a gran escala o "cómo los cuerpos, con la tecnología, se han convertido ya en una extensión del sistema capitalista".

La instalación dialoga en cierta manera, según la comisaria Azar Mahmoudian, también iraní, con dos películas que se ofrecen en el mismo auditorio de la Fundación Tàpies, una de ellas, "Night of The Hunchback" (La noche del jorobado), de 1964, de su compatriota Farrokh Ghaffari, una adaptación de "Las mil y una noches".

Se trata de una filmación, que no olvida el sentido del humor, con toques que remiten a Luis Buñuel, protagonizada por un desdichado actor que muere una noche ahogado con su propia comida, tras actuar en casa de una pareja acomodada, relatando cómo su cadáver irá recorriendo diferentes esferas de la sociedad iraní, destapándose, finalmente, los bajos fondos de la capital del país.

La otra película, de apenas 30 minutos de duración, "Thicker Than Paint Thinner", es del propio Babak Afrassiabi, quien cuenta que está basada en la historia real de un exdrogadicto que se convirtió en un revolucionario, que acabó prendiendo fuego a un cine iraní, unos meses antes de que triunfara la revolución de 1979, provocando la muerte de 400 personas.

El proyecto "Motivos Sensibles", comisariado por Mahmoudian, está estructurado en varios capítulos, siendo el de "Inhalar" uno de ellos, y su artífice quiere "poner a prueba la ficción y otras convenciones".

Forma parte de un plan de cooperación europeo "4Cs: Del conflicto a la convivencia a través de la creatividad y la cultura", financiado por Europa Creativa.