Javier Herrero.

Morgan y Carolina Durante, dos bandas madrileñas jóvenes pero con un prometedor horizonte artístico, han brillado esta noche en la undécima gala de entrega de los Premios MIN, que concede la industria discográfica independiente a sus mejores embajadores del pasado año.

La noche ha sido especialmente próspera para los primeros, quienes se han hecho con cinco de las seis categorías en las que estaban nominados, incluidas las dos más importantes: mejor artista y mejor álbum del año por "Air".

"Imaginad que os esté pasando algo que nunca pensasteis que os iba a pasar. Lo tomamos como un milagro", han declarado casi apesadumbrados ante esta avalancha de reconocimientos.

Suyo ha sido también el premio al mejor directo ("Lo que nos da la vida", han dicho), a la mejor producción (de José Nortes) y al mejor disco de rock, gracias a esa fusión que realizan con la música soul, impulsada por la especial voz de Carolina de Juan, alias Nina.

"Es de puta madre que a una banda como la nuestra se le dé un premio de rock, aunque no lo parezca que lo es... porque lo es", ha reivindicado la artista entre el asentimiento del público.

Los madrileños Carolina Durante tampoco han salido mal parados en el reparto, decidido en su mayor parte por votación popular. Competían por cuatro galardones y se han llevado dos, el de mejor artista emergente y, sobre todo, el de mejor canción por ese trallazo directo, irónico y fresco que fue "Cayetano".

Ellos han sido los segundos grandes triunfadores de una ceremonia que ha vuelto a recalar en el acogedor Teatro Circo Price de Madrid y que, conducida por la "dominatrix" Julia de Castro, vocalista de De La Puríssima, ha contado con su actuación, así como con las de Dorian, John Grvy, Los Hermanos Cubero, Pedrina y Zahara.

Muy aplaudida, ella ha sido la distinguida por el mejor videoclip, el de "Hoy la bestia cena en casa", quizás un exiguo resultado para sus seis candidaturas de partida por el disco "Astronauta", aunque otros favoritos como La Plata, Belako o Novedades Carminha se han ido completamente de vacío.

Otra mujer, Christina Rosenvinge, reciente Premio Nacional de Músicas Actuales "en un año muy bueno después de otros malos", ha sido la acreedora del galardón al mejor disco de pop por "Un hombre rubio", mientras que el de hip hop y músicas urbanas ha ido a parar a SFDK por "Redención".

El de electrónica ha recaído en "Electrik" de Cycle, el de músicas del mundo y fusión en "Quique dibuja la tristeza" de Los Hermanos Cubero, el de jazz en "Chano & Colina" de Javier Colina & Chano Domínguez, el de flamenco en "El mito de la caverna" de Cañizares y el de clásica en "Concerto Zapico Vol. 2" de Forma Antiqua.

En las otras lenguas cooficiales del Estado, Tanxugueiras se han llevado el mejor álbum en gallego por su disco homónimo, Ruper Ordorika el de euskera por "Bakarka" y El Petit de Cal Eril por "El disc triangular".

Además ha habido distinción para Hazte Lapón por el diseño de su "Tú siempre ganas", para Gilberto Gil como el mejor artista iberoamericano y el honorífico Mario Pacheco para Marcela San Martín por sus tres décadas de profesión.

"Soy mujer y desde Mujeres de la Industria de la Música os invitamos a que nos ayudéis a dar visibilidad a las que trabajamos en todo esto", ha reclamado quien ha sido garante durante años de la buena programación de la no menos mítica sala Sol de Madrid.

No ha sido la única reivindicación de la noche. La "brecha de valor", término con el que se conoce el a su juicio escaso retorno económico que los gigantes tecnológicos como Google devuelven a los creadores por la explotación de su arte, ha sido la protagonista del discurso de Bruno Muñoz, presidente de la Unión Fonográfica Independiente (UFI), organizadora de estos galardones.