La exposición 'Tierra de sueños', con 40 instantáneas, puede visitarse en el Alderdi Eder hasta el 4 de noviembre

La fotógrafa Cristina García Rodero (Puertollano, Ciudad Real, 1949), Premio Nacional de Fotografía en 1996 y la primera persona de nacionalidad española que entró en la Agencia Magnum, entre otros muchos logros, traslada la dureza de la pobreza en la India y del trabajo que lleva a cabo con los más desfavorecidos la Fundación Vicente Ferrer "sin caer en lo melodramático" a través de las 40 fotografías de la exposición 'Tierra de sueños', organizada por la Fundación 'la Caixa' y el Ayuntamiento de San Sebastián en los jardines del Alderdi Eder.

En rueda de prensa en la capital guipuzcoana, Rodero, acompañada del alcalde donostiarra, Eneko Goia, y del director territorial Norte de CaixaBank, Juan Pedro Badiola, ha dado cuenta de los detalles de esta muestra, que puede visitarse hasta el 4 de noviembre, que refleja la vida cotidiana de los habitantes de Anantapur, en el estado indio de Andhra Pradesh, una de las zonas más pobres de la India.

'Tierra de sueños' es fruto del trabajo conjunto realizado entre la Fundación 'la Caixa' y la Fundación Vicente Ferrer en la India para mejorar las condiciones de vida de los más vulnerables. Ambas fundaciones invitaron a García Rodero a viajar al citado país asiático para documentar las condiciones de vida de las comunidades de Anantapur. Durante 45 días entre enero y febrero de 2015, la fotógrafa visitó hospitales, centros de acogida de mujeres víctimas de maltrato, escuelas, talleres, casas con el fin de dar voz a todas las personas que reciben ayuda allí de la mano del legado de Vicente Ferrer.

García Rodero ha puesto en valor esa "inmensa labor" y la "agilidad" con la cual la Fundación y sus voluntarios se readaptan a las situaciones y necesidades de esas personas. "Cuando se quiere ayudar se ayuda y se convence a la gente para que cada vez haya más ayuda", ha subrayado.

La fotógrafa ha confesado que este encargo supuso para ella "una gran responsabilidad" y fue "un trabajo difícil". En este sentido, ha explicado que al "reto" de difundir a través de sus fotografías la obra de Vicente Ferrer se sumaban las dificultades humanas y técnicas, con una "muy fuerte en exteriores y muy poca en interiores", así como "la falta de movimiento" en un país donde muchas cosas las resuelven sentados. "Yo hago movimiento siempre", ha explicado en alusión a sus imágenes.

Según ha confesado, no paró de "trabajar y trabajar" y al principio cada jornada resultaba frustrante para ella porque "no había movimiento, la luz era horrible, era muy difícil" y, además, "todo era poco para mostrar la labor de Vicente Ferrer". En total disparó 67.000 fotografías de las que seleccionó unas 127 que pueden verse en el libro de la exposición, unas 200 en un audiovisual y 40 en la muestra física, la mayoría retratos de mujeres, con un trabajo de edición de un año y medio.

García Rodero ha destacado que ha habido que trabajar "muy bien" las fotografías en laboratorio para poder sacar las grandes copias de la exposición a partir imágenes en un formato de 24 por 36 milímetros. "He querido mostrar el amor que te muestran estas personas con las cuales la vida a veces no es fácil", ha apuntado, para incidir en que "la responsabilidad" que suponía este encargo le hizo "trabajar muchísimo".

Sobre el hecho de que la mayoría de las instantáneas de la muestra sean retratos, García Rodero ha indicado que empezó a hacer retratos sobre todo mujeres por su belleza, por las ropas, abalorios, flores con los que se adornan, en parte por ese "deseo de se fotografiadas" y "luchando y luchando han salido fotos" que hablen de lo "injusto que es la vida sin caer en lo melodramático".

De este modo, ha explicado que su intención era mostrar el drama "pero sin que la gente se salga porque no lo puede ver". "Ha sido muy difícil y un placer, porque aunque sea un encargo, trabajar en libertad te facilita mucho las cosas".

Además, ha agradecido a la Fundación 'la Caixa' que lleve esta exposición a lugares "tan privilegiados" como San Sebastián, para que la ciudadanía pueda ir "caminando y dialogando" con sus imágenes.

"MISMAS ILUSIONES"

Por otro lado, García Rodero ha reflexionado sobre el hecho de que pese a las diferencias culturales, de idioma, etc, en los distintos lugares del mundo puedes comprender a otras personas por su mirada, por sus movimientos y "las diferencias se van perdiendo en el camino" porque "todos tenemos las mismas ilusiones y necesidades".

Además, ha destacado que trabajando en la India, a través de la realidad de otras personas, "no tan afortunadas como tú", te das cuenta de que "nuestras quejas se exceden". Por su parte el responsables de 'la Caixa' ha destacado que 'Tierra de sueños' es la 31 exposición que esta Fundación trae a San Sebastián desde 1993 con más de dos millones de visitantes en las mismas.

Goia ha calificado de "placer y honor" poder acoger esta muestra en la ciudad y ha agradecido a García-Rodero, que celebra este miércoles su 71 cumpleaños, el acudir a la capital guipuzcoana "en unas circuntancias tan difíciles" debido al covid-19.