El más claro y directo, el director de lidia, el sevillano Daniel Luque, que con ésta cumplía su única comparecencia este año en el ciclo isidril, de ahí su evidente disgusto de que las cosas "no hayan salido ni un mínimo de lo que esperaba".

"Ha sido desesperante pero sinceramente no ha habido opción a nada, uno -su primero- porque no transmitía nada y, aunque no me he encontrado con él, en Madrid se necesita otra cosa totalmente distinta; y el otro porque ya en varas la gente se ha puesto muy a la contra, aunque luego tampoco se ha prestado ni para justificarse con él", reconocía el joven espada de Gerena.

A pesar de que esta tarde en Madrid era fundamental para el devenir de su temporada, en la que no había entrado en ninguna de las grandes ferias de los primeros meses del año como Valencia o Sevilla, Luque no tira la toalla, pues, como él mismo afirma, "confío en mis posibilidades y el que resucita una vez es capaz de hacerlo más veces", concluía.

Igual de desilusionado abandonaba la plaza el malagueño Jiménez Fortes, aunque, lo único positivo que ha sacado no sólo de esta tarde sino de su doble paso por San Isidro era que "a gente ha podido ver otro torero, otras formas diferentes, una evolución hacia lo que quiero ser en esta profesión".

"Es verdad que en mi situación se necesitan las orejas, pero cuando no hay enemigo es muy difícil que eso ocurra. Lo único que podía hacer era mostrarme tal y como soy, tratar de hacer las cosas lo mejor posible y tratar de, dentro de lo que podía, dar un toque de atención para poder entrar en las ferias", afirmaba el malagueño.

Sobre su lote, Fortes consideraba que: "mi primero no tenía al aire, al contrario, creo que tenía clase y ritmo, lo único que tenía la casta muy justa y se ha acabado pronto; y el otro sencillamente no ha servido", concluía.

Y el francés Juan Leal, que saludó la única ovación de la tarde, no sin algunas protestas también, merced a una faena en la que aunó un tremendismo sin sentido ante un toro que se rajó enseguida, aseguraba que: "Al menos Madrid ha captado la verdad con la que he tratado de hacerlo todo".

"Sé que este tipo de apuestas son difíciles de entender, como mi propio concepto, pero yo no soy de los que tiran la toalla, todo lo contrario, busco, doy vueltas y trato de lograr siempre mi objetivo, ya sea de una forma o de otra, de ahí que las sensaciones interiores no sean malas del todo. Ahora toca seguir entrenando y trabajando, y ojalá llegue pronto otra oportunidad", declaraba Leal.