Como ya hicieron tres pontífices anteriores, el Papa Francisco también visita Fátima. En esta ocasión para conmemorar el centenario de las apariciones de la virgen a los niños Francisco, Jacinta y Lucía, y también para canonizar a los dos primeros, que murieron siendo niños.

“Cuando todo va fatal Dios está para sacar el bien del mal”

“Hubo una intervención en la historia”, ha dicho en 'La Tarde' el obispo de San Sebastián, José Ignacio Munilla. “A veces, Dios mira desde lo alto y sufre. La historia de Fátima está ligada a una teología de la historia: cuando todo va fatal Dios está para sacar el bien del mal. Cómo sacar lecciones de la historia, esto es lo que acontece en Fátima”, ha aseverado.

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Respecto a los secretos de Fátima, ha narrado que “en 1942 se revelaron los dos primeros que estuvieron guardados desde 1917”.

“El primero es la visión que tienen los niños del infierno. Una imagen de una cantidad de personas y de almas que les estremece. La virgen les dice que la devoción al inmaculado corazón de María quiere ser el antídoto de ese camino de increencia y perdición”, ha detallado Munilla.

“El segundo secreto se anuncia que la guerra se terminará ( I G.M.) pero que puede venir una segunda, que así ocurrió”, ha dicho.

Y sobre el tercero, el obispo ha contado que “se ha hecho publico hace muy pocos años”. “En 1957 lo tuvo la Santa Sede. Cuando Juan Pablo II tuvo el famoso atentado, pidió que le trajesen el sobre del secreto para leerlo. Entonces, lo hizo público en el 2000. Y se leía que un hombre vestido de blanco caería por las balas. Hubo una duda grande en su interpretación. El secreto es que moría, pero hubo la duda de si se había cumplido, o si podía acontecer algo mas. Entonces, Juan Pablo II dijo que la Virgen María había intercedido para que esa bala no le matara”, ha narrado el obispo de San Sebastián.