5 millones de personas viven solas en nuestro país, una tendencia que va en aumento. Cada vez hay menos familias. Uno de los lugares que más sufre la soledad es Galicia. Un franciscano ha encabezado un proyecto que busca acabar con este problema. Se llama Roberto, más conocido como Padre Lista, y está utilizando un convento que iba a ser abandonado para atraer a personas y generar una familia postiza. Al comienzo quedaban solo los lunes, pero ahora suelen quedar más tiempo. Los que forman parte de este proyecto dicen que no es un centro de día, sino que intentan hacer lo mismo que hacen en casa. Hacer el desayuno, hacer la compra, limpiar, pagar los gastos de luz y agua. Lo msimo que harían por sí solos en sus casas. 

"A nivel espiritual y de comunicación me aporta mucho".

Ramón Luis Lavandeira es una de las personas que acude habitualmente al centro: "Por un divorcio, me quedé solo. Por fortuna, un día el Padre Lista se puso en contacto conmigo, quedamos, y me comentó el proyecto. Me pareció una gran oportunidad". Un proyecto que aspira a crecer y a llegar a más gente: "La idea es hacerlo más extensivo y con más frecuencia". Algo que ayuda a este tipo de personas mayores que se encuentran en esta situación: "A nivel espiritual y de comunicación me aporta mucho".

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Otra de las personas que colabora con el proyecto es Antía Leira, trabajadora social: "Soy la coordinadora y también hago de mediadora frente a todos los usuarios que tenemos en el convento". Quieren dejar claro que no se trata de un centro de día: "En este tipo de centros haces actividades ocupacionales, pasas el día. Pero nosotros nos diferenciamos en que queremos centrarnos en el concepto de familia, compartir inquietudes, hacer tareas para mantener la casa, al igual que en el día a día". No quieren anquilosarse en ver la televisión o jugar a las cartas todo el rato, se trata de fomentar lazos con estas personas que están solas".