El Ministerio del Interior, que ha hecho bandera de la prometida equiparación salarial de policías y guardias civiles con el resto de cuerpos autonómicos, parece guardar un as en la manga para que el órdago no se vuelva en su contra. Ocurre cuando sindicatos policiales y asociaciones de la Guardia Civil han encendido ya las luces rojas después de que en la mesa técnica a la que asisten para confrontar cantidades y afinar conceptos de cara a esa subida nadie del departamento que dirige Juan Ignacio Zoido haya presentado aún números concretos para esa subida. Así lo aseguran sus portavoces.

Lo más relevante que han conseguido saber, y casi de hurtadillas, ocurrió en la última reunión de los representantes de los guardias civiles el viernes, 2 de febrero. Allí trascendió que los generales de la cúpula evalúan en 1439 millones de euros el coste de la equiparación. La estimación de las asociaciones ronda los 1400 millones. Pero allí también supieron que el “arreglo” que prepararía Interior puede quedar  muy lejos, sólo 600 millones.

Los sindicatos de la Policía advierten, después de que se pusiera el asunto en manos de Hacienda y, por lo tanto de Montoro, que el tiempo pasa y el Gobierno juega con fuego. “O el presidente y el pp ponen orden o es evidente que esta legislatura empieza su cuenta atrás” aseguraron hace una semana. (El ultimo tambor de guerra que necesita Moncloa en este momento). Exigen que un representante del Ejecutivo atienda sus demandas en esas mesas técnicas, donde les atiende un comisario principal o, en el caso de la guardia civil, un general o el director general.

Frente al desconcierto de los sindicatos, Interior mantiene el compromiso de que gracias al gobierno de Mariano Rajoy habrá equiparación en 2020. Lo reiteró Zoido este miércoles en el Congreso. Y eso cuando los presupuestos de 2018 siguen en el aire.

Nieto tiene una propuesta

La respuesta del Ministerio no se puede hacer esperar mucho más y todo indica que la próxima semana el Secretario de Estado de Seguridad, José Antonio Nieto, presentará a sindicatos y asociaciones los datos que le exigen. El punto inquietante para policías y guardias civiles es la letra pequeña del compromiso del ministerio: equiparación “con los mismos derechos sociolaborales” que el resto de policías autonómicas. Derechos adquiridos de la guardia civil como las casas o pabellones y la policia, como la segunda actividad, pueden correr peligro. Ni unos ni otros están dispuestos a consentirlo.

Más allá de las promesas y pendientes de lo que les anuncie Nieto muchos dan ya por hecho que la oferta final de la subida quedará lejos de los 1500 millones prometidos en tres años. Lo de los 600 millones comienza a sonar como probable, lo cual no seria equiparación sino “una subida importante”, que deslizó también de director de la Guardia Civil en su último encuentro con las asociaciones. El ultimo gesto del Gobierno seria llevar adelante esa medida, si fuera necesario, con un decreto-ley. Ya lo adelantó el ministro Montoro. Pendientes de lo que les cuente Nieto, Policía y Guardia Civil siguen con las espadas en alto.