El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, ya mira a las elecciones autonómicas, locales y europeas de 2019 para consolidar el "proyecto de país" de su partido, basado en la redistribución justa de la riqueza, frente al "tándem perfecto" que forman, a su juicio, Mariano Rajoy y Albert Rivera.

"Sufrimos el gobierno de un partido anegado por la corrupción, pero a Rajoy siempre le quedará Rivera", ha asegurado hoy el líder de los socialistas, antes de destacar: "Si el PP mete la mano, Rivera echa una manita".

Con estas dos frases ha resumido el líder de los socialistas el que será uno de sus puntales estratégicos de cara a las elecciones del año que viene, para las que queda poco más de un año, pero que el PSOE ya tiene en el punto de mira.

Para ilustrarlo, Sánchez se ha desplazado hasta Ayerbe, un municipio de 1.000 habitantes a unos 25 kilómetros de Huesca, un ejemplo más de la resistencia a la despoblación que caracteriza a muchas localidades de la provincia oscense y de la comunidad aragonesa en general.

Aquí ha tenido lugar la Fiesta de la Rosa del Altoaragón, acto en que ha coincidido de nuevo con el presidente autonómico y líder de los socialistas en la comunidad, Javier Lambán, y ambos han puesto de manifiesto que las diferencias de antaño, incluso en lo personal, han quedado enterradas.

Porque los dos han coincidido en que la precampaña de esos comicios, que tendrán lugar a finales de mayo de 2019, ha comenzado ya.

Uno de los ingredientes que no faltarán durante estos meses es la batalla abierta contra Ciudadanos, el partido que los sondeos sobre intención de voto sitúan como ganador de las elecciones generales si se celebraran hoy.

Detecta el PSOE que puede haber una fuga de parte de sus tradicionales votantes a la formación "naranja", así que para taponarla Sánchez ha situado en la misma orilla al líder del PP y al de Ciudadanos.

"Cada vez que el PP hace aguas, acude presto Rivera a aprobar unos presupuestos antisociales o a encubrir la corrupción, como se está viendo en la Comunidad de Madrid", ha proclamado.

La polémica que ha levantado el supuesto máster que cursó la presidente regional, Cristina Cifuentes, ha motivado una respuesta a corto plazo de los socialistas, la moción de censura, ya presentada, pero también una estrategia a medio plazo: retratar a Ciudadanos como una muleta del PP, si no la misma cosa.

Madrid es, por tanto, el escenario idóneo para el plan del PSOE, dado que la moción la apoya Podemos, pero no Ciudadanos de momento, y su concurso es esencial para que prospere.

Para añadir presión al partido de Rivera, el secretario general de los socialistas ha recalcado que "si algo ha quedado en evidencia a estas horas es que Cifuentes, acabar el máster, parece que no lo ha acabado", de modo que si se mantiene en el cargo en lo que queda de legislatura, será porque "Rajoy y Rivera han mirado a otro lado".

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Ha insistido en que el presidente del Gobierno y líder del PP y el de Ciudadanos, "hacen un tándem perfecto".

Ante un millar de militantes socialistas, muchos de ellos de la tercera edad, Sánchez ha abordado dos asuntos cruciales en la provincia de Huesca y en la comunidad aragonesa: la despoblación y las pensiones.

Respecto a lo primero ha reivindicado la importancia de buscar en Europa soluciones "justas y equilibradas", lo cual depende de la llegada de fondos de financiación para ello, y la necesidad de reconocer con leyes las "especificidades" del medio rural.

Sobre lo segundo, ha reiterado dos de sus principales propuestas: blindar las pensiones en la Constitución y revalorizarlas en función del IPC. También ha enfatizado su apuesta por que un impuesto a la banca ayude a sostener la Seguridad Social.

Asimismo, Sánchez ha reprobado la gestión de un Gobierno que no puede presumir de igualdad por cuanto es el principal motor europeo de desigualdad; ni de lucha contra la violencia de género, ya que no destina los recursos suficientes, ni de promoción del medio rural ni de educación pública.

Para el dirigente madrileño, precisamente la educación pública será "la joya de la corona" de su Gobierno, si alcanza la Presidencia.

Son todas ellas razones para rechazar el proyecto de Presupuestos Generales del Estado de este año, tal y como ha recordado.

El líder del PSOE ha terminado su intervención con una mención a lo que está por venir: "Estamos a punto de ser la primera fuerza política de este país".