El inicio de la investigación se produjo en un control de documentación que agentes de este cuerpo policial estaban realizando en el barrio de la Rochapea de Pamplona, donde dieron el alto a un vehículo en el que viajaban dos jóvenes en dirección a la ronda de Pamplona. Ambos portaban diferentes cantidades de dinero en efectivo, y uno de ellos, escondía en dos pequeñas carteras, trece papelinas de cocaína, hecho por el que fueron detenidos. Igualmente, llevaban 900 euros en efectivo. Los detenidos facilitaron domicilios falsos, lo que hizo sospechar a los agentes que pudieran ocultar más estupefacientes. En el posterior registro de los domicilios, los agentes hallaron 7,5 kilogramos y medio de speed preparado para la venta.