Lourdes Ramírez es la jefa de estudios del colegio y nos cuenta que los niños cuando salen al recreo no piensan en jugar sino en dar de comer a las gallinas.

‘No hemos tenido trabas legales para montar la granja con las cuatro gallinas’ dice Lourdes. Los niños montaron una fiesta de bienvenida para recibir a los animales y los más pequeños hicieron unas caretas en forma de gallina para recibirlas.

Los padres han contribuido animadamente a levantar el proyecto e incluso unos albañiles que trabajaban en la zona aportaron material para hacer el gallinero y ampliarlo. Los productos del huerto se suelen repartir entre los alumnos y se los llevan a casa; ‘los huevos se los llevan las profesoras y suelen hacer postres que luego traen al colegio” nos cuenta Lourdes Rodríguez.