Hace diez años, España se estremecía con una desaparición que tuvo un trágico final: la desaparición de la pequeña Mariluz, una niña onubense de cinco años que murió a manos de un hombre que, en aquel momento debía haber estado en prisión por abusar de su propia hija. Pero la sentencia no se había ejecutado y la pequeña Mariluz tuvo la desgracia de cruzarse en el camino de aquel asesino.

El padre de Mariluz, Juan José Cortés, alza la voz para defender la prisión permanente revisable, que ahora algunos proponen derogar. “Hay muy pocos detractores y los pocos que hay son, por desgracia, políticos de algunos partidos que si están en la oposición es por algo”, dice el padre de la niña, que añade: “Hay que escuchar la voz del pueblo”.

Según Juan José Cortés, la prisión permanente revisable “es una petición del pueblo, es una necesidad y una herramienta para el sistema judicial, es un mecanismo de defensa ante futuros ataques a menores de estas personas cuando salgan a la calle y no estén reinsertadas, y el amparo para que los padres sepan que los asesinos de sus hijos van a estar en la cárcel para siempre, a no ser que se reinserten”.

“Toda persona tiene derecho a la reinserción, pero lo que no se puede consentir en un país como el nuestro, en una democracia tan avanzada, en la época digital... es que nosotros a sabiendas de que un reo puede volver a delinquir, que hay poca capacidad de reinserción como así lo indican muchos expertos, permitamos que estas personas salgan a la calle y puedan acometer el mismo delito”, explica el padre de Mariluz Cortés en 'La Noche de COPE' con Adolfo Arjona.

Pasados diez años de la muerte de su hija, Juan José Cortés admite: “¿Si he perdonado? Es una pregunta sin retorno. Si no hay reconocimiento de los hechos, ni arrepentimiento y no pide perdón, no se le puede perdonar porque lo primer es reconocer los hechos y eso, Santiago del Valle no lo ha hecho”.

“Es muy difícil vivir con esto toda la vida, no es algo que tengas las esperanza de que se cure. Es la pérdida de una hija para toda la vida y la pena que eso conlleva. Es como un corazón que no bombea sangre, está ahí pero no tiene vida”, se sinceraba Juan José Cortés en 'La Noche de COPE'.