María Marte llegó a España con 24 años y tres hijos. Aquí comenzó a trabajar fregando platos en el mismo restaurante del que, hasta hace solo unas semanas, era chef titular. Ha aparcado su carrera profesional para ayudar a otras mujeres. ‘Sé que lo voy a conseguir, ayudar a mujeres sin recurso que no tienen nada y que no tienen fe ni confianza en sí mismas. He recibido muchos mensajes de arquitectos que me proponen diseñar el local sin cobrar; ahora hay que buscar toda la infraestructura para enseñar a cocinar a estas mujeres. República Dominicana es un país que está despertando gastronómicamente. No paramos de recibir mensajes de apoyo diariamente’, asegura con firmeza.
‘Es complicado de entender y la gente me pregunta, pero la respuesta es sencilla: el ayudar se ha convertido en mi forma de vida y es lo que quiero hacer’, afirma con alegría María Marte. Respecto a si es fácil enseñar y aprender a cocinar, la chef con dos estrellas Michelín concluye que hay que nacer ‘con una pizca de deseo de dedicarte a la gastronomía porque es una profesión que necesita pasión y dedicación. Se puede aprender a cocinar si le pones interés’.