Las autoridades del distrito escolar en el que está la escuela secundaria Marjory Stoneman Douglas de Parkland (Florida, EE.UU.), donde murieron 17 personas en un tiroteo el mes pasado, han anunciado la próxima implementación de nuevas medidas de seguridad. El superintendente escolar del condado Broward, Robert Runcie, ha señalado en una carta enviada a los padres de familia del centro escolar que desde el primer lunes de abril solo se permitirá el uso de mochilas que distribuirá el distrito escolar a los estudiantes, los cuales además deberán portar una identificación en todo momento. En la misiva, de dos páginas, Runcie ha revelado incluso que "exploran" la posibilidad de instalar detectores de metal en los puntos de entrada al recinto escolar.

"En las últimas semanas, hemos recibido muchas consultas sobre los esfuerzos de nuestro distrito para fortalecer el campus Marjory Stoneman Douglas y ampliar los protocolos de seguridad en la escuela", ha señalado el superintendente. El anuncio del superintendente llega un día después de que los alumnos de esta escuela Jordan Salter, de 18 años, y Gavin Stricker, de 17, fueran detenidos por portar armas blancas dentro del centro educativo. Ese mismo martes, un tercer estudiante de Marjory Stoneman Douglas fue recluido en un hospital mental tras publicar mensajes amenazantes y fotos de municiones y armas en una red social.

La oficina del gobernador de Florida, Rick Scott, anunció hoy que ha dispuesto a ocho efectivos de la Patrulla de Carreteras de Florida para vigilar las inmediaciones del colegio. Mientras tanto, Zachary Cruz, hermano del autor de la matanza de Parkland, quedó detenido después de que, el martes también, le fuera impuestas una fianza de 500.000 dólares para salir en libertad tras haber sido arrestado por entrar en la escuela Marjory Stoneman Douglas a pesar de que la policía se lo había prohibido. Su hermano mayor, Nikolas Cruz, de 19 años, es el autor confeso de la matanza perpetrada en la escuela secundaria de Parkland el pasado 14 de febrero, y está en prisión a la espera de juicio. Enfrenta 17 cargos por asesinato premeditado y otros tantos por intento de asesinato, por los que puede ser condenado a muerte.