Andrea estaba embarazada y llegó de parto al hospital con una dilatación ya de cuatro centímetros. Lo curioso es que no llegó en el coche de su familia sino en el de su autoescuela. Conducía su profesor y dentro, de acompañantes, iban también un examinador de tráfico y otra persona que, como ella, iba a intentar aprobar el examen práctico de conducir.

“Andrea estaba cometiendo errores durante el examen por las contracciones tan fuertes que tenía”

Andrea estaba embarazada ya de 39 semanas y salía de cuentas cinco días después, pero aun así decidió presentarse al examen práctico. Pero poco duró la prueba. “En mitad del examen dije que no podía más. Tenía que salir de un semáforo pero la contracción fue tan fuerte que no pude ni pisar el acelerador”, relata Andrea a COPE.

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“Andrea estaba cometiendo errores durante el examen por las contracciones tan fuertes que tenía”, ha explicado su profesor de autoescuela, Juan Ángel Amezcua a COPE.

Fue entonces cuando Juan Ángel se puso al volante para llevar de urgencia a Andrea al hospital. “El viaje fue apoteosico”, recuerda. Una hora después de llegar nacía David Emmanuelle.

Pese a todo Andrea no aprobó el examen aunque le mantienen las oportunidades para presentarse.

Andrea y su pareja mantienen una extraña relación con los exámenes de conducir. Precisamente el pasado 29 de septiembre su marido tuvo que examinarse justo el mismo día de su boda. “Se examinó, aprobó y de ahí el profesor lo llevó directamente a casa para que se preparara y llegara a la boda”.