Serena Williams, número uno del mundo, firmó este jueves una cuarta remontada en la actual edición de Roland Garros que le llevó hasta la final del torneo, frente a la suiza Timea Bacsinszy, 23 del ránking, a quien venció por 4-6, 6-3 y 6-0, en 1 hora y 54 minutos. La menor de las Williams, que busca sumar su vigésimo triunfo en un Grand Slam, el tercero en París tras los de 2002 y 2013, se medirá contra la checa Lucie Safarova, 13 del mundo, que no le ha ganado en ninguno de los 8 duelos entre ambas. Aquejada de un proceso gripal, según su entrenador, Patrick Mouratoglou, la estadounidense se sobrepuso a los problemas físicos para jugar su tercera final en París. Antes, la checa Lucie Safarova se clasificaba en Roland Garros para la primera final de su carrera de un Grand Slam, tras derrotar a la serbia Ana Ivanovic, vencedora en 2008, por 7-5 y 7-5 en 1 hora y 52 minutos. La número 13 del mundo, que jugó por segunda vez las semifinales de un grande, tras las de Wimbledon del año pasado, consiguió a sus 28 años detener el renacer de Ivanovic, que pese a todo firmó su mejor actuación desde que levantara la copa Suzanne Lenglen hace siete años.