No ha sido un buen año para Xisco Hernández. Cierto es que todo ha acabado con una alegría mayúscula al salvar la categoría el Atlético Baleares pero no menos cierto es que para el futbolista mallorquín esta temporada ha sido dura y no sólo por la grave lesión que le apartó varios meses de los terrenos de juego y que llegó, incluso, a poner en riesgo su participación en la recta final de temporada, algo que al final se produjo debido al tesón y sacrificio del bien apodado "mago" de Son Malferit.
Ayer, durante la retransmisión post partido en el Tiempo de Juego de Cope Mallorca, Xisco rompió a llorar emocionado al escuchar a Chando, ex jugador del Atlético Baleares y persona vinculada esta temporada al club durante varios meses en su parecla deportiva. "Te lo mereces más que nadie. El fútbol pone a cada uno en su lugar y aunque no quiero destacar a una persona tú desde que volviste has dado tu mejor versión y me alegro mucho por ti", le dijo el ex delantero blanquiazul a un Xisco que agradeció las palabras de su ex compañero emocionado.
Entre lágrimas, el número siete del equipo blanquiazul, que al ser sustituido ayer se llevó una de las mayores ovaciones de la tarde, agradeció el apoyo de la afición y también reconoció que "el futuro es incierto". "Sé que seré feliz haya donde vaya o quedándome", añadió un Xisco que dijo que lo que quiere es "sentirse valorado". Aunque el Atlético Baleares le ha ofrecido la renovación la propuesta realizada es a la baja y todo hace indicar que el de ayer ante el Ebro ha sido el último partido de Xisco Hernández como jugador del equipo blanquiazul.