Llevamos todo el verano hablando de fallecimientos en nuestras playas; la última de las 15 muertes se producía ayer en Torremolinos. Pero precisamente hoy tenemos una historia con final feliz. Un agente de la Policía Nacional fuera de servicio ha rescatado con vida a un francés de 53 años que estaba a punto de ahogarse en la playa de Los Álamos, también en Torremolinos, por el fuerte oleaje y la resaca.  El bañista no podía salir del mar y este policía, que estaba con su familia en la playa, no de servicio, se metió al agua para rescatarlo y llevarlo hasta la orilla. La víctima ha enviado una carta de agradecimiento a la Comisaría Provincial agradeciendo el acto de valor del agente.