La Fiscalía de Málaga pide 20 años de prisión para el acusado de matar a Alejandro, un niño de tres años y medio, hijo de su pareja, cuyo cuerpo apareció en una balsa en los Montes de Málaga, suceso que ocurrió en febrero del año pasado. Está acusado de un delito de asesinato. El día del suceso, el acusado (que entonces tenía 24 años) recogió al niño del colegio y lo llevó hasta los Montes de Málaga, hasta una balsa con agua para la extinción de incendios, a 15 kilómetros de la capital. Según el fiscal, arrojó al pequeño a la balsa, consciente de que no sabía nadar, por lo que el niño se ahogó. Justo después, se fue hasta el centro comercial de Rincón de la Victoria para contar que se le había perdido allí; dio hasta cuatro versiones hasta que su propia declaración dirigió a los agentes hasta ese lugar de los Montes de Málaga, donde apareció flotanfo el cadáver de Alejandro. El acusado padece un déficit leve de inteligencia, pero no lo suficiente como para no saber lo que hacía. Ahora se va a enfrentar a 20 años de cárcel que pide el fiscal para él.