En 1910 abría sus puertas el Hotel Ritz en Madrid y la noche de este martes, solo unos cuantos, pudieron disfrutar del último menú que se ha servido en su recinto y contempla el aspecto que lucía el establecimiento desde su apertura.

El hotel ha cerrado sus instalaciones para someterse a una renovación de 99 millones de euros, que Mandarin Oriental había anunciado en el momento De su compra, hace más de dos años, junto con el grupo saudí Olayan.

Todos los días del mes de febrero hasta este martes, el Hotel Ritz ha ofrecido para cenar un menú degustación especial con los platos más representativos del restaurante Goya, como el parmentier de caviar, la suprema de pollo de Bresse trufado o las milhojas en homenaje al rey Alfonso XIII.

El resto de los platos son un carpaccio de carabineros con aceite de su coral, almendras tostadas y teja de sésamo; un escalope de foie-gras a la parrilla con salsa bordalesa; un bogavante en salsa bisque y un mini créme-brulée de trufa negra de Soria.

Durante el cierre del hotel, cuya reforma se espera que termine a finales de 2019, su plantilla participará en diversos programas de formación o se le proporcionará asignaciones temporales en otros establecimientos de Mandarin Oriental en preparación para su reapertura.

En el proyecto de remodelación del hotel, que cuenta con 106 habitaciones y 47 suites, participa el arquitecto español Rafael de La-Hoz y los diseñadores franceses Gilles & Boissier.

La intención es mejorar las instalaciones y los servicios del hotel conservando su esencia, que está enmarcada en el estilo 'Belle Époque' del edificio original.

Fuentes del Hotel Ritz han informado de que las obras prevén entre otros aspectos la remodelación de la cúpula y la instalación de una piscina.

Las mismas fuentes han señalado que los muebles y objetos de valor del hotel se guardarán en unos almacenes de Madrid y más adelante se decidirá si algunos de ellos son vendidos directamente o a través de subasta.

Tras la reforma, los nuevos propietarios del establecimiento añadirán al nombre de Ritz el de Mandarin Oriental.

El hotel, ubicado en el llamado 'Triángulo de Oro del Arte' por la cercanías de los museos del Prado, el Thyssen-Bornemisza y el de Arte Moderno Reina Sofía, ha sido a lo largo de su historia anfitrión de miembros de la realeza, políticos, los magnates y famosos