Racha de 9 meses sin marcar: "Me he quitado un peso de encima. En el fútbol, por desgracia, se mira más el trabajo con balón que sin balón. Me presioné después del descenso porque quería devolver al equipo a Primera División". El gol ante el Nàstic de Tarragona: "Es la primera vez que tengo que regatear a un compañero para meter un gol... Lo celebré con muchísima rabia. Tenía muchísimas ganas de volver a marcar un gol". Un duro inicio de temporada a nivel personal: "Cuando tienes a tanta gente detrás apoyando y no puedes mostrar el 100%, te vas a casa fastidiado. Fuera del club, con mi padre hablo mucho y con mi mujer también hablo mucho y me tranquiliza. Lo pasé mal. Me encerré en mí mismo, le daba vueltas a la cabeza... me decía 'qué podía estar haciendo mal'. Fue muy complicado. Al final intentas buscar soluciones. Cambié de look para cambiar el chip. A ver si venían tiempos mejores. Son locuras...". Cambio de Primera a Segunda División: "Hay menos espacios y es mucho más difícil. La realidad es que en Segunda hay menos espacios que en Primera y para mí es más fácil jugar en Primera. Ahora estamos intratables y los equipos se encierran más atrás". Relación con Juan Ramón López Muñiz: "Tenemos un equipo muy completo y todos pueden jugar en Primera. En eso se basa este equipo. Que juegue uno u otro es siempre beneficioso para el equipo. Tiene las ideas claras en la cabeza y utiliza toda la plantilla. Cuando uno baja el nivel se llame como se llame le sienta en el banquillo porque no le tiembla la mano". Su futuro en el Levante: "Pasé un verano muy complicado. Tenía esa responsabilidad, esa culpa porque el equipo bajó. Estuve diez días sin querer saber nada. El Levante me trajo con 24 años de Madrid al filial y me cambió la vida. Me hizo contrato profesional... le debo todo al club. De corazón a mí me gustaría acabar el contrato que me queda y si el club está dispuesto a renovarme yo seguiría aquí muchos años". La afición le dedicó una canción: "Es un honor. Aunque al principio pensaba: 'estos cabrones que dejen de cantar la canción que me están gafando'". ¿Su mejor entrenador en el Levante?: "Pondría en segundo lugar a Muñiz. En el primero está Mendilibar porque fue quien apostó para que me quedara en el primer equipo".