El Atlético de Madrid aclaró este viernes que el defensor uruguayo José María Giménez, que no ha podido entrenar los dos últimos días por una herida infectada en su pierna derecha, sufre una "infección de tejido celular subcutáneo", que se está tratando con antibióticos. Esta infección no afecta a "articulaciones ni otras estructuras", según el parte médico publicado por el club en su página web, y la incorporación del defensor charrúa al grupo está "pendiente de la evolución" de esta dolencia, que se suma a la lesión muscular de grado I-II en el adductor del muslo derecho que Giménez sufrió el 28 de enero contra el Alavés y por la que no ha recibido alta médica. La situación de Giménez y la lesión de su compatriota Diego Godín el pasado martes ante el Barcelona, una dolencia muscular de grado I en los adductores del muslo derecho; provocan que el entrenador argentino Diego Simeone solo tenga disponibles en este momento dos centrales de la primera plantilla: el montenegrino Stefan Savic y el francés Lucas Hernández. El entrenador argentino ensayó con Fernando Torres en punta de ataque durante el entrenamiento de este viernes, de cara al partido contra el Celta de Vigo del próximo domingo en el estadio Vicente Calderón. El delantero madrileño podría encadenar ante el Celta su tercera titularidad consecutiva, ya que fue de la partida en la vuelta de semifinales de la Copa del Rey contra el Barcelona y en el duelo de Liga frente al Leganés; en un ataque en el que también estarían el francés Antoine Griezmann y el belga Yannick Carrasco, según lo ensayado este viernes. El centro del campo lo ocuparían Gabi Fernández, Saúl Ñíguez y 'Koke' Resurrección, en un esquema que varió durante el entrenamiento desde el habitual 4-4-2 a un 4-2-3-1 en el que Saúl y Gabi ocuparon el doble pivote, Koke actuó como mediapunta flanqueado por Carrasco a la izquierda y Griezmann a la derecha; con Torres en punta. Simeone ensayó con una defensa en la que Juanfran Torres se mantiene como titular en el lateral derecho, posición a la que regresó en los últimos dos partidos en detrimento del croata Sime Vrsaljko, y el brasileño Filipe Luis por la izquierda. El francés Lucas Hernández y el montenegrino Stefan Savic actuarían como centrales, a la espera de si el uruguayo José María Giménez obtiene el alta médica.

El capitán del Atlético de Madrid, Gabi Fernández, admitió que la eliminación del equipo de la Copa del Rey a manos del Barcelona ha sido "un palo duro" para la plantilla, pero a la vez "un punto de inflexión" para "reencontrar al Atlético que todo el mundo quiere ver", aseguró Gabi en un vídeo del club, en referencia a la buena imagen de la segunda parte de la ida y del partido de vuelta contra el Barcelona en el Camp Nou.

El centrocampista rojiblanco ve al equipo "con muchísima confianza" y en unas condiciones "muy buenas" para afrontar los próximos retos de la temporada en LaLiga y la Liga de Campeones. Respecto al rival del próximo domingo, el Celta de Vigo, Gabi dijo que es un equipo "muy bueno", que tiene "las ideas muy claras" lleva tiempo jugando de la misma manera, aunque advirtió que a los rojiblancos ya no les queda margen de error.

El capitán del Atlético, que contestó en este vídeo a preguntas de los aficionados enviadas a través de las redes sociales, afirmó que su mejor recuerdo es la Liga 2014-15 ganada en el Camp Nou en la última jornada con empate ante el Barcelona (1-1) y aseguró que sigue teniendo "ilusión" por jugar, especialmente en el nuevo estadio que el Atlético inaugurará la próxima temporada.

"El mayor problema de los futbolistas que llevan mucho tiempo es desilusionarse, perder la ilusión de jugar por tu campo o en el mismo equipo. En mi caso es todo lo contrario, estoy ilusionado cada vez más en jugar en el Calderón y por supuesto poder hacerlo también en el Wanda Metropolitano, es una ilusión grande para todos", finalizó.