La asociación, que tiene previsto traer a 62 niños, junto a la asociación linarense Amigos del Sáhara Libre, que traerá a otros 58, busca a ocho familias jiennenses dispuestas a acoger en sus casas a los pequeños, con el fin de que los refugiados tengan acceso al sistema sanitario, una dieta variada, aprendan español y reciban el calor de las familias jiennenses, en definitiva, que sean como un hijo más de la familia.
A un mes de que los menores lleguen, las familias de acogida ya esperan con ilusión a sus pequeños, y las nuevas familias acogedoras se debaten entre los nervios y la incertidumbre de quien va a conocer a alguien que pasará a formar parte de su familia. Otro de los fines de este programa es dar visibilidad a un conflicto que mantiene a los refugiados saharauis «viviendo en el exilio, en Argelia, o bajo la ocupación de Marruecos, en el Sáhara Occidental, desde hace casi 43 años. Ex colonia española, la población saharaui sufre el abandono y los intereses de la comunidad internacional. Por ello, el programa Vacaciones en Paz, que se lleva a cabo desde el año 1992 en la provincia, pretende paliar la sinrazón a la que son sometidos estos menores durante los meses más duro del desierto de los desiertos».