Alfonso Osorio, ministro de la Presidencia del primer gobierno democrático, ha dicho en 'Herrera en COPE' que "hay que  volver a una nueva reorganización" de las autonomías, porque su creación "artificialmente" en la Transición fue "una decisión errónea" y una "aberración".

Para Osorio, el problema territorial sigue siendo el mismo, "el País Vasco y Cataluña", por lo que "resolverlo de una forma racional, reconociendo una cierta autonomía, una autonomía válida, concreta y eficaz a las regiones que lo tienen en su propia sangre y en su propia historia. Y a las demás que sean descentralizaciones bien pensadas, bien hechas, eficaces, para que se pueda gobernar el país como se puede gobernar en estos momentos Alemania".

A juicio del exministro, otro de los problemas de España es "el sistema partitocrático que tenemos". "Hoy quienes mandan en España son las ejecutivas de los partidos, son los que sustituyen a los poderes", ha lamentado Osorio, quien reclama que "los poderes independientes funcionen actuando como contrapeso". "Si esto no se cambia, España estará gobernada por seis personas que hacen lo que les da la gana". 

"Yo lo advertí, que si instalábamos una partitocracia, la democracia representativa no quedaría instalada", ha insistido el exministro de la Presidencia.

Cuando ahora escucha hablar de la Transición, cuarenta años después de las primeras elecciones democráticas, a Osorio le invade "una mala nostalgia, porque están hablando personas que no habían nacido la mayoría". Osorio ha puntualizado que el problema entonces "era muy claro: continuaba el régimen o íbamos a una democracia". Y "eso se decidió entre personas que estaban a un lado y a otro de la barrera, que lo hicieron con el bueno y sano propósito de que hubiera una convivencia". Y ahora, según Osorio, "no están escuchando a los verdaderos protagonistas". 

Pero recuerda que en aquella época "había grupúsculos que no sé lo que querían, que ahora se manifiestan en estos muchachos de la coleta que no sabían de nada de lo que estaba sucediendo y que están utilizando la mentira como arte político".

A pesar de ello, Osorio recuerda que lo que imperaba era el deseo de "entendimiento entre españoles notables, claramente decididos a que hubiese una época de paz entre los españoles", y que solo hay una forma de explicárselo a los jóvenes: "con la verdad".

"Si no quieren oír, si se inventan el pasado. Si dicen que Carrillo fue un traidor, si dicen que Felipe era un político obsoleto cuando ha sido de una trascendencia enorme para modernizar España,. las conclusiones a las que llegan son ininteligibles", ha remarcado el exministro de la Presidencia.