No esperaba Bob que su barbería de Palma se hiciera tan famosa por el cartel, pintado por su novia, y que cuelga en la fachada. Indica que en el local pueden entrar hombres, por descontado, hombres acompañados por sus perros y está totalmente prohibida la entrada a mujeres. Asegura Bob Van de Hoek, holandés de nacimiento que decidió esta política de empresa "porque ya he trabajado en peluquerias con mujeres y niños y no, decidí que ahora solo para hombres y como yo tengo perro pues que puedan entrar".Porque, cuando Bob atiende a un cliente se puede tirar bantante tiempo con él, "una hora, bebemos un wisky y hablamos de cosas de hombres, cosas de hombres". Este peculiar barbero está a punto de casarse y por este hecho no tiene problemas con su novia, "es la diseñadora del cartel y está 100% a mi lado de no dejar a las mujeres entrar. No, no tengo contento al Instituto de la Mujer balear, pero no me importa, mi base es humor primero y segundo, si no quieren entender el humor o lo que hacemos aquí..., lo siento".Sobre si puede ser multado, Bob Van de Hoek asegura que "espero que no, yo no tengo ningún problema con las mujeres, hay sitios donde solo entran mujeres y me parece bien".Mujeres en la barbería no, gracias