No se entiende el gol de Señor del España – Malta del 83, sin la narración de José Ángel de la Casa. 30 años en la profesión y confiesa que “me ha costado ver el fútbol sin trabajar”. Aunque sin trabajar solo se refiera a “en la televisión”, porque pese al párkinson que sufre, no para de combatirla con deporte y trabajo “para que no progrese la enfermedad”.

Acaba de estrenar un documental sobre su enfermedad, dirigido a los enfermos, para que no tengan miedo, y hagan todo lo posible por no ceder al párkinson. “Un Señor de la Casa”, es un documental en colaboración con la Federación de Parkinson que enseña el día a día del periodista. “Afortunadamente mi enfermedad va lenta, y no me planteo cirugías, porque de momento hago una vida normal”. Y es totalmente cierto: juega al golf, da clases de piano, corre, y pasea por sus mil almendros, “me ilusiona pasear por ellos porque los hemos plantado uno por uno, y me da paz”.

El primer temblor de la enfermedad le ocurrió en un Roma – Real Madrid. “Fue la primera vez que me lo notaron desde fuera”, y desde entonces no ha parado de luchar contra ella pues “soy muy dudoso en la toma de morfina”. Tiembla poco, pero lo peor es coger pesos.

Ahora su vida, entre el reto de retrasar la enfermedad, está el de seguir su vocación por el deporte siendo teniente alcalde de su pueblo Los Cerralbos. “Hacemos una prueba todos los años, y vienen grandes atletas a correr con los niños”. Porque el párkinson puede hacerle temblar, pero no dudar de querer siempre, llegar a meta.