ESCUCHA LA ENTREVISTA COMPLETA A LA DOCTORA MAGDALENA DE TROYA

La Academia Española de Dermatología lleva a cabo una campaña de detección precoz del cáncer de piel que consiste en enseñar a la población a distinguir los signos de alarma que pueden aparecer en nuestra piel o en los lunares de nuestro cuerpo, enseña a autochequearnos la piel para prevenir.

Y para ello hay que conocer "el ABCDE de los lunares que son los signos de alarma de los lunares" explica la doctora Magdalena de Troya, cuatro reglas que nos van a permitir ver el estado de nuestros lunares y sus posibles cambios:

A.- Asimetría: "si nuestros lunares comienzan a tener una forma asimétrica o irregular nos debe preocupar"

B.- Bordes: "los melanomas suelen tener bordes irregulares, cartográficos como si fueran un mapa, los lunares buenos tienen unos bordes redondeados, nítidos".

C.- Color: " los lunares buenos tienen un solo color más claros o más oscuros, pero un solo color y los melanomas tienen varios colores que van del rojo, rosa hasta el negro y grises"

D.- Diámetro: "los buenos son lesiones pequeñas, los melanomas suelen manifestarse con un tamaño mayor de más de seis milímetros de diámetro".

E.-Evolución: "a veces un melanoma carece de los signos anteriores de alarma, pero sufre una evolución, hay cambio tamaño o exudación, sangrado o cambio de tamaño, estos son signos de alarma y esto nos debe llevar a consultar con un dermatólogo".

Si nuestros lunares presentan alguno de estos signos, "lo importante es acudir cuanto antes al especialista porque el melanoma visto a tiempo es curable, pero si invade la piel y llega a los vasos sanguíneos puede llegar a causar complicaciones y metástasis" advierte la doctora De Troya.

Ante estos días de vacaciones, de horas de playa y piscina, es muy importante saber las consecuencias de tomar sol sin protección o en las horas de mayor radiación, "la relación cáncer de piel y sol es muy estrecha. Las radiaciones ultravioletas están muy relacionadas con el cáncer de piel, pero no solo el sol, también las cabinas de rayos ultravioletas por ello, debemos tener buenos hábitos de fotoprotección que es muy difícil en nuestro país porque somos muy tolerantes a las quemaduras solares; hay que cambiar el concepto, porque una quemadura solar en un joven menor de 18 años es el principal riesgo de cáncer de piel en edad adulta; una quemadura solar, poner la piel roja y que duela multiplica el riesgo de padecer melanoma en edad adulta" destaca y advierte la doctora Magdalena de Troya.

No podemos tampoco olvidar que hay distintos cáncer de piel, "el melanoma es la forma más maligna de cáncer de piel, es la que más tememos porque es la forma más letal de cáncer de piel y la que más afecta a las persona jóvenes, pero no es la más frecuente, la inmensa mayoría de cáncer de piel son carcinomas celulares y carcinomas basocelular y espinocelular y no son cánceres que suelen matar, pero se encuentran en la cara y en las zonas más expuestas de la piel y lleva a cicatrices y merman nuestra calidad de vida" explica la dermatóloga.

La Academia Española de Dermatología quiere dejar claro que "el mejor fotoprotector eres tú”, somos cada uno de nosotros y por ello "hay que protegerse de la radiación directa, pero también de la radiación indirecta porque en la playa, el agua, la arena irradian los rayos del sol".

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Protegerse con inteligencia sin olvidar que también debemos asimilar vitamina D para nuestros huesos y de la que hay déficit, como también advierten los médicos, "la cantidad de exposición solar es en torno a unos 20 minutos máximos al día, como media, pero depende del tipo de piel también, los que tienen la piel más clarita necesitan menos porque van a producir la vitamina D inmediatamente y no hay que exponer todo el cuerpo, con brazos y piernas tendríamos una asimilación perfecta de la vitamina D".