El ataque al Rey Felipe VI en el Parlamento termina con una "llamada al orden" al diputado Luís Bará, que este miércoles decía "no la quemo porque estamos en un estado cerrado" mientras hacía añicos la imagen. La decisión ha sido apoyada por los votos de PP y PSdG y rechazada por BNG y En Marea.

Al portavoz del PP Pedro Puy le parece "una verguenza el ataque a quien representa la democracia y el autogobierno de Galicia", el del PSdG Xoaquín Fernández Leiceaga considera "impropia" la actitud del diputado nacionalista. 

Los compañeros de Bará, sin embargo, lo arropan. Así Olalla Rodil sigue viendo el ataque a la Monarquía como un acto de defensa de la libertad de expresión. "No vamos a permitir que le pongan la mordaza a la Cámara", decía.