El Pacto de Toledo es el tema por el que se ha decantado Pedro Sánchez en el inicio de la carrera que ha iniciado para recobrar el foco perdido. El líder del PSOE ha iniciado en Granada este jueves una ronda de 50 asambleas abiertas que va a celebrar en toda España.

Sánchez sostiene que la actualización del sistema público de pensiones requiere de una reforma "urgente" que pase por reconstruir el Pacto de Toledo para frenar la merma del poder adquisitivo de los pensionistas, frente a la opción del PP de "seguir endeudándose".

Durante su intervención ante unos 500 asistentes, según la organización, el secretario general del PSOE ha desgranado su propuesta para sostener el sistema público de pensiones, que pasa fundamentalmente por la creación de dos impuestos: uno que grave las transacciones financieras y otro extraordinario a la banca.

"Si hay un Gobierno socialista, la banca rescatará el sistema de Seguridad Social" con este gravamen, según Sánchez, para quien si los españoles pagaron 77.000 millones de euros para rescatar a los bancos, "ya va siendo hora de que los bancos arrimen el hombro".

Y pese a que "las élites políticas y mediáticas dicen que eso es demagogia", Sánchez ha asegurado que es posible y que para ello es necesaria una reforma urgente que pase por reconstruir el Pacto de Toledo que, dice, rompió el PP en 2013, y por introducir medidas como mejorar los sueldos y racionalizar los gastos de modo que algunos vinculados a la Seguridad Social pasen a los presupuestos.