El PSE-EE ha declinado la invitación recibida para acudir al acto previo a la disolución de ETA organizado en Cambo-les-Bains (Francia) el próximo 4 de mayo y ha exigido que la anunciada desaparición de ETA se produzca "sin intentos de maquillar su larga historia de dolor".
Los socialistas vascos señalan en un comunicado que el bautizado como "Encuentro Internacional para Avanzar en la resolución del Conflicto en el País Vasco" pretende "acompañar la decisión de los terroristas con unos objetivos no definidos claramente".
"Por esta razón y porque queremos evitar contribuir con nuestra presencia en cualquier acto que pueda ser utilizado para maquillar la historia de ETA o buscar justificación a sus crímenes, el PSE-EE ha decidido declinar dicha invitación y no enviar ninguna representación a este acto", precisan.
Muestran su deseo de que la desaparición de ETA sea "clara e inequívoca, sin esperar por ello ninguna contraprestación" y recuerdan que ETA "ya reconoció su derrota en 2011, con un gobierno socialista en España y un gobierno socialista en Euskadi, y que fueron la respuesta social, el trabajo de las Fuerzas de Seguridad, la colaboración internacional, la acción de la Justicia y la política las que dieron al traste con su intento de imponer por la fuerza un determinado proyecto político".