La Audiencia de Palma ha confirmado el procesamiento por presunto homicidio por imprudencia por omisión para que se juzgue a la exdirectora y el jefe de mantenimiento del centro socioeducativo de Es Pinaret por la muerte de un menor interno en un incendio en octubre de 2015.

La sección segunda del tribunal provincial ha desestimado los recursos de apelación interpuestos por los dos investigados contra el auto del Juzgado de Instrucción número 9 que acordó continuar las actuaciones por los trámites de proceso abreviado contra ambos por presunto homicidio por imprudencia cometido por omisión y lo ha confirmado.

El suceso ocurrió el 14 de octubre de 2015, cuando el menor fue recluido en su habitación del hogar Tramontana perteneciente al centro socioeducativo de Es Pinaret como medida educativa correctora y prendió fuego a un colchón y varias prendas, declarando un incendio, según recuerda el auto de la Audiencia de Palma

La habitación estaba cerrada desde el exterior y las cerraduras no funcionaron correctamente, tuvieron que usar un extintor como ariete, lo que impidió sacarlo a tiempo de la celda, sufrió graves quemaduras y falleció.

El sistema contraincendios y de extracción de humos no funcionaba desde mayo de 2014, el sistema de alarma de la habitación se había retirado para evitar que el menor lo dañase porque anteriormente había protagonizado actos vandálicos, y la ventana exterior de la celda carecía de cristal porque el interno lo había roto varias veces, lo que permitió la entrada de oxígeno y avivó el fuego.

En el auto con el que dio por terminada la instrucción, el juez instructor estimó que la muerte imprudente del menor ha de ser achacada al jefe de mantenimiento, encargado de velar por el mantenimiento de las instalaciones, y a la exdirectora por no haber tomado las medidas de seguridad necesarias para evitar el fatal desenlace en relación con el sistema de detección de incendios, los mecanismos de apertura de la puerta y el timbre de emergencias.

En relación con la exdirectora de Es Pinaret, que alegó en el recurso que su cometido era la organización educativa, el auto de la Audiencia de Palma señala que también era "la última responsable del mantenimiento de los medios materiales del centro de reforma".

El tribunal aprecia que "existe fundamento" para que sea sometida a juicio por delito de homicidio por imprudencia porque "conocía o debía conocer" que en el módulo Tramontana el sistema contraincendios no estaba operativo desde mayo de 2014, que el sistema de cierre de la puerta era manual y que la celda del menor no disponía de sistema de alarma.

Sabía que el menor era conflictivo, que tenía antecedentes de autolesión y recibía asistencia psicológica por lo que "un proceder cauteloso" habría sido dar órdenes concretas para reparar el sistema antiincendios o pedir el traslado del menor a otro módulo más seguro.

"Estuvo en su mano haber podido controlar el riesgo de incendio o haberlo podido disminuir considerablemente y favorecido acciones salvadoras", señala el auto de la Audiencia.