El expresidente catalán Artur Mas ha dejado la presidencia del PDeCAT, decisión que ha justificado por el calendario de causas judiciales y la necesidad de que su figura no "frene" la emergencia de nuevos liderazgos en la expansión del proyecto de Carles Puigdemont.

Mas ha dejado claro que "no se retira de la política, porque la vida es muy larga y el futuro dirá", aunque sí abandonará "la primerísima línea".

El expresidente ha negado que su renuncia a la presidencia del PDeCAT guarde relación con la estrategia de Carles Puigdemont, y ha dicho que "respetará" las decisiones que éste adopte, si bien ha evitado en todo momento avalar su estrategia ante la nueva legislatura catalana.

Las elecciones de Cataluña del 21-D dejaron al PdeCAT derrotado. La creación del partido Junts Per Catalunya para la candidatura significaron el principio de la destrucción del partido de Artur Mas.

Las elecciones de Cataluña del 21-D dejaron al PdeCAT derrotado

El partido sucesor del CDC (Convergencia Democrática de Cataluña) será presidido por la exconsellera Neus Munté. Hasta ahora Munté era la vicepresidenta del PDeCAT, un cargo que asumió junto a Mas en julio de 2016: ambos presentaron una candidatura conjunta en unas primarias en las que no tuvieron rival.

Problemas internos

El principal problema del PdeCAT en los últimos meses, ha sido Carles Puigdemont. Su estancia en Bruselas ha provocado roces con miembros de su propio partido. Cada vez se han hecho más frecuentes y muchos considera que él y el resto del partido caminan hacia diferentes caminos y trayectorias. El PdeCAT se negó a pagar los viajes a Bruselas de altos cargos del Govern como Elsa Artadi o Jaume Clotet, ambos ajenos al partido.

Marta Pascal y David Bonvehí, coordinadores generales del partido, quedaron fuera de las listas de Puigdemont para el 21-D, lo que provocó también nuevos desencuentros.

El caso del Palau de la Música

El caso de desfalco que tiene como protagonista a Felix Millet, presidente del patronato de la Fundación Orfeó Català-Palau de la Música, que se destapó en el año 2009 y que salpicó a Convergencia como destinataria de comisiones que recibía a través del Palau de la Música de Barcelona y pagadas por Ferrovial a cambio de concesión de obra pública.

En el mes de junio de 2009 la Fiscalía de Barcelona se querelló contra Félix Millet, presidente del Palau de la Música; Jordi Montull, director administrativo; Gemma Montull, directora financiera del Palau; Daniel Osácar, tesorero de Convergencia.

El expresidente de la Generalitat Artur Mas ha desvinculado su renuncia a la presidencia del PDeCAT de la sentencia del caso Palau de la Música, que se conocerá el próximo lunes, y ha alegado que CDC ya pagó por ello "el precio más alto", que fue "autoliquidarse".

Mas apunta que el hecho que el anuncio de su renuncia se produce a menos de una semana de la sentencia del caso Palau de la Música y que esto puede dar lugar a "interpretaciones". “Todas aquellas sensaciones de que CDC fue un partido que podría no haber hecho las cosas suficientemente bien", la formación ya pagó "el precio más alto que se puede pagar, que es desaparecer, autoliquidarse", ha asegura Mas.

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Además, Artur Mas ha remarcado que en el juicio del caso Palau de la Música no se le citó "ni tan solo como testigo", y ha asegurado que todos los hechos analizados corresponde a los "años 90", en la etapa de Jordi Pujol.

Salidas del partido

La dimisión de Artur Mas es una de las tantas dimisiones que ha sufrido el partido en los últimos meses.

Jordi Cuminal, diputado de Junts Pel Sí a través del PdeCat, anunció su dimisión en octubre mostrando su desacuerdo con la convocatoria de elecciones y para reclamar la declaración inmediata de la República independentista de Cataluña.

Albert Batalla fue el siguiente en dimitir. Era uno de los hombres claves del núcleo del expresidente Artur Mas.