Este martes el Instituto de la Empresa Familiar (IEF) celebra su Asamblea Anual. En esta ocasión la ciudad que acogerá la cita es Barcelona, una elección que no es casualidad. Juan Corona, director general del Instituto de la Empresa Familiar, ha reconocido que “teníamos ganas de hacerla desde hace tiempo y la Junta Directiva pensó que este era un buen momento”.

Durante la reunión del equipo económico de ‘La Linterna’, Corona ha reconocido que “las circunstancias políticas son francamente complejas”. Sin embargo, ha querido destacar que “las compañías están funcionando muy bien con un entorno que no es precisamente favorable”. Si así fuese, añadía, “las posibilidades que se ofrecen al tejido empresarial español son muy importantes” porque “tenemos grandes empresas y empresarios en España”.

En total, el proceso independentista ha provocado el cambio de sede social de más de 3.800 compañías. Del Instituto de la Empresa Familiar, que tiene en torno a 40 socios, “seis u ocho” se han marchado fuera del territorio catalán. Su director general ha recordado que en economía “las decisiones irreversibles no existen”, pero no ve “probabilidad de retorno” durante los próximos años. Por eso, incidía Corona, son decisiones complicadas para los empresarios familiares por “el enraizamiento al territorio” que caracteriza a este tipo de firmas.

Además de la estabilidad política en Cataluña, la Asamblea Anual del IEF tratará asuntos como el tamaño de las empresas y su competividad. En este sentido, Corona ha destacado que “España tiene un tejido empresarial de mucha calidad, pero tiene un problema: En el momento en el que salimos fuera de nuestras fronteras experimentamos una falta de competitividad verdaderamente importante”.