La situación económica que se va a encontrar Pedro Sánchez a su llegada a la Moncloa nada tiene que ver con la que se encontró Rajoy en el año 2011. Si de algo puede sentirse orgulloso el ya ex presidente es de revertir una recesión económica que estuvo a punto de costarnos que nuestro país fuera intervenido. ¿Cuáles son logros de Rajoy y también qué le ha quedado por hacer?

El paro ha sido hasta el último día el principal caballo de batalla de Rajoy... Cuando tomó posesión el número de parados rozaba los cinco millones trecientos mil... EL dato fue aún peor en el 2012: casi seis millones de desempleados y una tasa de paro del 26%. A día de hoy, y según la última Encuesta de Población Activa hay tres millones, 800 mil parados y tenemos una tasa de paro del 16.7%, diez puntos nos inferior. De hecho una de sus primeras medidas fue la reforma laboral que le costó, por cierto, una huelga general. También tuvo que subir los impuestos, en contra de lo que recogía su programa electoral y reducir de forma drástica el gasto público.

Y es que nuestro déficit público por aquel 2011 rondaba el 10% ... A cierre de 2017 estamos en torno al tres por ciento y la previsión era alcanzar el superavit en el año 2021. En cuanto al PIB hemos pasado de ser el farorillo rojo de europa a liderar el crecimiento de la zona euro. Hace siete años estábamos en plena recesión con una tasa negativa del menos uno por ciento... A cierre del primer trimestre, el avance estaría en torno al 3% interanual y con varias instituciones revisando al alza sus previsiones de crecimiento para nuestro país. Lo que no ha logrado reducir es la deuda. Todo lo contrario: llegó a superar, en el 2014 el 100% del Producto interior bruto. Desde ese año ha ido reduciendose, aunque estamos en el 98%, valores demasiado altos. Tampoco ha sido capaz Rajoy de aprobar un nuevo sistema de financiación autonómica... Son los deberes que le deja al nuevo gobierno socialista.