Los aviones del 45 Grupo del Ejército del Aire están diseñados para alojar en sus viajes al Rey, al presidente del gobierno y a otras altas autoridades del Estado. Esta unidad dispone de siete aeronaves -dos Airbus 310 y cinco Falcon 900- que han ido siendo adquiridas en un período de 30 años, las últimas en 2003. Los Airbus 310 están configurados para un máximo de 67 pasajeros, aunque en el mismo modelo de avión en una línea aérea caben 270. La razón es que están modificados de tal forma que la mitad de su espacio lo ocupan dormitorios y otras comodidades para los viajeros VIP. Su autonomía es de alrededor de 11 horas, puede alcanzar -sin hacer escalas- la costa este de Estados Unidos u Oriente Próximo.

Estas dos aeronaves cuentan de manera permanente con personal de mantenimiento para reparar cualquier avería. Cada cuatro meses son sometidas a revisiones cortas, y a exámenes en mayor profundidad cada dos años. Los Falcon 900 están preparados para transportar a 14 pasajeros, tienen una autonomía de siete horas de vuelo, y llevan -en algunas ocasiones- un mecánico de apoyo. Su autonomía es de unas siete horas de vuelo, es decir, pueden llegar sin repostar a la costa este de Canadá.

Sus revisiones cortas se llevan a cabo cada año, y una más exhaustiva cada seis años. El Ministerio de Defensa realiza ya estudios para la futura sustitución de estos aviones. Uno de los candidatos para reemplazar al Airbus 310 es el Airbus 330, que posee más autonomía, mayor capacidad de carga y alcance. Y para relevar a los Falcon 900 el Falcon 8X. Los aviones del 45 Grupo han realizado 169.000 horas de vuelo desde que se creó, lo que supone el equivalente a unas 3.000 vueltas al mundo. Han volado a 120 países. Desde que entraron en el Ejército del Aire los Airbus 310 han completado 16.000 horas de vuelo y los Falcon 900 cerca de 50.000.