Marta Salguero

Con el cartel de entradas agotadas, la cita prometía. Más de 200 personas han asistido hoy al museo Pablo Serrano y esta vez no han ido a contemplar una de sus exposiciones; buscaban otro tipo de arte: disfrutar de la música en directo de la banda Rufus T.Firefly y de un "vermú canalla" acorde con el grupo.

Pero no todo ha salido como estaba previsto. La lluvia ha obligado a descender unas plantas este primer vermú musical, que inicialmente se iba a celebrar en lo más alto del museo, en su emblemática terraza, abriendo paso así a la programación de actos al aire libre de la temporada.

Aunque faltaba la terraza, su ausencia no ha sido inconveniente para que los asistentes disfrutaran de una propuesta atípica en la ciudad: música en directo dentro de un museo.

Ha sido el primer concierto-vermú de los tres previstos este mes de abril en el Instituto Aragonés de Arte y Cultura Contemporáneos (IAACC) Pablo Serrano de la capital aragonesa.

Allí, en la azotea, con unas vistas privilegiadas de la ciudad, actuarán también -siempre que el cielo lo permita- La Habitación Roja (14 de abril) y Maga (5 de mayo).

Tres conciertos -cada uno maridado con un tipo de vermú hecho para la ocasión- que servirán de antesala para el Festival Polifonik Sound que se celebrará en Barbastro los días 22 y 23 de junio y que la organización ha querido acercar de esta forma a Zaragoza.

El año pasado esta cita en la capital aragonesa fue nocturna con una única actuación de Carlos Sadness. En esta ocasión, la cita se ha triplicado, y la noche se ha cambiado por el día y la copa por el vermú. De fondo, la música.

Rufus T. Firefly, uno de los grupos del cartel, ha tocado los temas de su último disco, "Magnolia", que han retumbado en las amplias estancias del museo.

Como si estuvieran en el salón de su casa, los asistentes han disfrutado del directo y han degustado un vermú "canalla", aunque el grupo más que canalla es psicodélico, especialmente su último álbum.

Sea como fuere, el vermú ha sido diseñado por Bodegas Jaime para acompañar esta banda madrileña, que toma su nombre de un personaje protagonizado por Groucho Marx.

"¿Y en qué consiste un vermú con este adjetivo?", se preguntaban algunos. Pronto han salido de dudas. El ingrediente secreto, el que ha puesto personalidad a la bebida, ha sido el cannabis. El vermú Tourmedon se ha servido con una espuma de mango y con polvo de cannabis, una delicia para quienes han podido degustarlo.

Y mientras unos disfrutaban del vermú, otros han preferido situarse en primera línea para seguir de cerca una hora de concierto que ha comenzado con "Tsukamori", "El halcón milenario" y "Cisne negro" y ha dejado para el final sus temas más coreados como "Nebulosa Jade", "Magnolia" o "Río Wolf".

Las primeras filas han seguido el concierto sentados en el suelo, relajados, mientras escuchaban las canciones del grupo, algo que a Víctor Cabezuelo, el cantante de la banda, le ha recordado a un vídeoclip de Led Zepelin donde el público disfrutaba de la música en esta postura. "Creo que esta va a ser la vez que más cerca estemos de Led Zepelín", ha comentado Cabezuelo, quien ha asegurado que ésta ha sido la primera vez que han tocado tan temprano: a las 13.00 horas.

Además de sus temas conocidos, Rufus T. Firefly ha tocado también una canción nueva, de la que no han desvelado el nombre y que formará parte de la "segunda parte" de su último disco. Así lo ha llamado, segunda parte, ya que seguirá esa línea psicodélica iniciada por el grupo en su último álbum.

Con este buen sabor de boca, el Polifonik Sound de Barbastro calienta motores para recibir este año a una nutrida representación de la música independiente. La Casa Azul, Carlos Sadness, Delorentos, Stanich o Pecker completan el cartel. Hoy han sido 220 personas, el aforo completo, allí se esperan más de 2.000.