El ministro de Educación, Cultura y Deporte, Íñigo Méndez de Vigo, ha abogado hoy en la ceremonia de entrega del Premio Cervantes por que el nuevo universo digital se escriba, se programe y se desarrolle en español: que las máquinas aprendan a hablar español.

"Si entre todos logramos que el español se posicione como lengua tecnológica, que las máquinas aprendan a hablar español y se programen en nuestra lengua, estaremos beneficiando a la comunidad hispanohablante presente y tejiendo un camino de prosperidad inédito en nuestra historia para todas las generaciones futuras", ha dicho en el discurso de presentación del nicaragüense Sergio Ramírez, Premio Cervantes 2018.

Su discurso en el Paraninfo de Alcalá de Henares (Madrid), lleno de referencias literarias, e incluso poemas, se ha apoyado en el espíritu del primer galardonado con un Cervantes, el poeta Jorge Guillén, quien en 1976 agradeció su premio "honrado" porque hubieran elegido a un autor "contrario al régimen" como espíritu de "un acto de concordia", ha dicho Méndez de Vigo, que "no ha dejado de estar nunca presente".

"También lo está en un día como hoy -ha añadido el portavoz del Gobierno- cuando Nicaragua vive horas difíciles. Abogamos por la concordia en libertad y democracia como símbolo de esperanza para responder a los anhelos de todos los nicaragüenses".

El ministro ha recordado que hoy, Día Internacional del Libro, se conmemora tanto el aniversario del fallecimiento de Miguel de Cervantes, como los de William Shakespeare y Garcilaso de la Vega, y que por eso es la fecha elegida para entregar el más importante galardón de la literatura en español.

Ha introducido la figura del premiado con anécdotas personales que rodearon los momentos más decisivos de su vida, desde la escritura de su primera novela al "secuestro" literario que sufrió mientras desempeñaba labores como máximo dignatario de su país, que le obligaron a escribir robando horas al sueño.

Ha agradecido a los reyes de España que, como es habitual, han presidido la ceremonia, su fidelidad a esta cita con la cultura, porque "esa cercanía y ese cariño es un fiel reflejo del que sentimos todos los españoles".

"El español es libertad: desde Cervantes hasta Serio Ramírez. Es una lengua que no tiene dueño, y ahí reside su fortaleza. Pero al tiempo, sí tiene agentes, y cada vez más: cada uno de esos millones de hispanohablantes", ha considerado Méndez de Vigo.

Se ha referido asimismo a los "más de 500 millones de hispanohablantes en el mundo" y ha recordado que el español es "la segunda lengua materna del planeta por número de hablantes, la segunda en redes sociales, la tercera lengua más utilizada en internet" y que más de 21 millones de alumnos lo estudian como idioma extranjero.

En ese sentido, ha señalado que "nuestra obligación es seguir impulsando la expansión del español y de la cultura en español, y aprovechar su condición de lengua multinacional en los retos que nos plantea la revolución tecnológica".

"Es ahora, en definitiva, cuando podemos y debemos conseguir que el nuevo universo digital se escriba, se programe y se desarrolle en español", ha precisado.

También ha recordado el ministro al recientemente fallecido escritor mexicano Sergio Pitol, ganador del Cervantes en 2005, como "ejemplo y referente de amor a las letras y a la cultura en español".

El ministro ha concluido que "cerca de medio centenar de libros llevan la firma, el talento y el ingenio" de Ramírez.

"No voy a desglosarlos todos porque prefiero pensar en la escritura de nuestro galardonado como algo continuo, como un espíritu libre y global, donde su prosa manda sobre cualquier otro destino, donde el todo es más poderoso que las partes", ha resumido.