Aunque las actrices españolas apoyen la iniciativa contra el abuso promovida por las actrices norteamericanas, esta noche se han dejado llevar por su gusto y por diseños que dibujaran su silueta con escotes vertiginosos, espalda al aire, muchos brillos y espectaculares joyas que han hecho resplandecer aún más su belleza. Los flashes se desataron con la llegada de Penélope Cruz, con un diseño blanco de Atelier Versace, con cadenas en hombros y cintura, que acompañó con unos pendientes de diamantes de la colección Swarovski Fije Jewelry. Momentos después, llegó Javier Bardém y ambos posaron juntos, sonrientes y tan distendidos que incluso se besaron ante los fotógrafos. 

El negro y el diseño español triunfan en la alfombra roja de los Goya

La actriz como algunos de los invitados lució como complemento un abanico rojo, el símbolo para denunciar la escasa presencia de mujeres nominadas. Elegante, sofisticada, de negro con una capa dorada, Marisa Paredes, galardonada con el Goya de Honor, deslumbró con la sobriedad de líneas que plasma siempre en sus patrones Sybilla. A la actriz la acompañaba su hija, María Isasi, con un vestido de Rubén Hernández Costura. Como una reina, con diadema de diamantes, Nieves Alvárez deslumbró con un diseño de Dolce&Gabbana, también en negro. Del mismo tono, Nathalie Poza, nominada a mejor actriz por “No sé decir adiós”, quien confió en la costura de la diseñadora Ana Locking para esta noche de gala. 

Precioso el diseño que ha lucido Irene Escolar, en un favorecedor fresa, de Santos Costura, con vertiginoso escote en V, espalda cruzada y falda fruncida en tul de seda. Un diseñador por el que Cayetana Guillen Cuervo siente debilidad, y que ha confeccionado para ella un vestido de espalda descubierta, con tirante de azabache y falda de corte capa en “douppion” de seda negro. Con la esperanza de subir por segundo año consecutivo a recoger un Goya, Anna Castillo lució un vestido de Villalba, en negro, con cuello de brillantes, mientras que su compañera de reparto Belén Cuesta, también nominada a mejor actriz de reparto, lucía una creación de Pedro del Hierro con delicadas joyas de Bárcena. 

También se eligió las joyas de Bárcena Marián Álvarez que presentó uno de los premios un luciendo un vestido azul noche de Lexdeux. El diseño internacional y más colorido fue el elegido por Hiba Abouk que se decantó por un Azzedine Alaïa, mientras que Leonor Watling lucía un Stella Mccartney, en rojo pasión con la espalda al descubierto. Teresa Helbig fue de nuevo la elegida por Úrsula Corberó, que deslumbrante con un vestido bordado con micro lentejuelas ocre y cadenas doradas. 

Entre los caballeros, la sastrería contemporánea de García Madrid ha sido la elegida por un gran número de actores nominados como Andrés Gertrúdix, David Verdaguer, Eneko Sagardoy o Agustín Villalonga, encargado de entregar el Goya de Honor. Juan Diego Botto, un seductor de mirada intensa, también optó por el esmoquin de la última colección de García Madrid. Siempre buscando dar un paso hacia adelante, el actor y director, Eduardo Casanova, lució un esmoquin con brillantes y chaleco, pero sin camisa, una creación de Palomo Spain, la revelación de la moda española. Los dos presentadores Joaquín Reyes y Ernesto Sevilla, lucieron un esmoquin de Tom Black, durante la primera parte de la gala, mientras que para la segunda la Pujil, ha sido la firma elegida.