El musicólogo, folclorista y etnógrafo Joaquín Díaz ha defendido hoy el libro en papel como "una prótesis imprescindible" del ser humano que es "absolutamente necesario" sostenerlo, mirarlo, leerlo y asimilarlo "pero siempre a la distancia adecuada", que es "la medida del brazo".
El impulsor del Centro Etnográfico de Urueña (Valladolid) y presidente honorífico de la Cátedra de Estudios sobre la Tradición en la Universidad de Valladolid ha realizado esta reflexión durante la inauguración de la XXXIII Feria del Libro de Zamora, que se celebra desde esta tarde hasta el próximo domingo.
En el discurso inaugural, Díaz ha citado a autores como Jorge Luis Borges para subrayar que el libro es "una extensión de la memoria y de la imaginación".
También se ha referido al novelista autor de Crónicas Marcianas y Fahrenheit 451 para defender el libro en papel, que ha invitado a oler para comprobar, como dijo Ray Bradbury, que "el olor de un libro nuevo sólo puede compararse con el que despide un libro viejo, que es mejor todavía".
Lejos de pensar que están pasados de moda, Joaquín Díaz ha observado cómo los libros "despiden un olor muy actual" al tiempo que de ellos emana "la esencia del tiempo".
Ha citado al escritor y ensayista francés que firmó sus libros bajo el seudónimo de André Maurois y que en "El arte de leer" recomendó "conocer a la perfección algunos pocos escritores" antes que abarcar una gran cantidad de autores pero de forma superficial.
Pese a su defensa del libro en papel, ha declarado a los periodistas antes de la apertura de la feria que éste no es incompatible con el libro electrónico.