De este modo, el Gobierno Provincial avanza en el compromiso adquirido por Moliner en el I Foro contra la Despoblación Rural de la provincia celebrado el pasado viernes en el Palacio Provincial a la hora de implantar y reforzar todos los servicios que generen el mejor ecosistema para que la gente viva en los pueblos.
Mediante una inversión de 458.000 euros, la administración provincial va a permitir que a lo largo de este año en 31 municipios de Castellón abra sus puertas este programa impulsado por Moliner en 2013 para atender a las personas dependientes con problemas de discapacidad física o en fase inicial de deterioro cognitivo.
De hecho, desde el pasado mes de marzo los nueve primeros municipios beneficiarios de esta programa ya se han sumado a esta red sanitaria provincial que tal y como ha destacado la diputada de Acción Social, Elena Vicente-Ruiz, “hasta este año contaba con 24 unidades en la provincia y que merced el firme compromiso de esta administración con la igualdad de oportunidades y el desarrollo del territorio, alcanzará durante este año los 55 centros”.
Así, los nueve pueblos que este año ya han abierto sus Unidades de Respiro Familiar “permitiéndonos responder a la alta demanda generada por un servicio que se está convirtiendo en un aliado de nuestros pueblos a la hora de hacer frente al envejecimiento poblacional en el mundo rural castellonense” y a los que se irán sumando 22 más a lo largo del año son los siguientes: Catí, Caudiel, Sot de Ferrer, Argelita, Fanzara, Altura, Culla, Moncofa y Aín.
“De este modo, -ha resaltado Vicente-Ruiz- llevaremos este servicio a toda la provincia permitiendo que nuestros mayores ganen en autonomía, calidad de vida y que reciban los cuidados necesarios en sus municipios sin necesidad de que tengan que abandonar sus hogares favoreciendo de este modo la conciliación de la vida familiar y laboral”.