Agentes de la Policía Nacional se han concentrado frente a las comisarías de Oviedo, Gijón y Avilés para exigir al Ministerio del Interior que tome las medidas necesarias para garantizar su seguridad.

El secretario general del Sindicato Unificado de Policía (SUP), Matías Castaño, ha reconocido estar "alarmado" ante la "persecución" que están sufriendo los agentes en Cataluña, expulsados de los hoteles y vilipendiados, y ha reiterado la exigencia de medidas "contundentes" para que se garantice el cumplimiento de la ley y los derechos de sus compañeros.

Además, ha apuntado que su sindicato lleva "bastante tiempo" pidiendo una reestructuración del modelo policial, ya que, desde su punto de vista, no es normal que los Mossos d'Esquadra participen en órganos estatales, con acceso a información importante, ni que cobren 600 euros más en su nómina que el resto de policías españoles.

Por otra parte, el secretario general de la Confederación Española de Policía, Miguel Ángel Campos, ha destacado la "decepción" de su sector con la clase política española, por un lado con aquellos que se han saltado las leyes, y por otro con un Gobierno que "no ha estado a la altura de los acontecimientos".

También ha lamentado la celebración en el día de ayer de la fiesta patronal de la Policía Nacional, que a su modo de ver debería haber sido suspendida o pospuesta ya que, teniendo en cuenta la situación que se está viviendo en Cataluña, "no había nada que celebrar".

Esta concentración "espontánea" ha tenido lugar en todas las dependencias policiales de España, a las que han acudido los agentes de los distintos cuerpos para mostrar su apoyo a los compañeros destinados a Cataluña.